Actualizado 07/10/2009 12:08

Economía/Motor.- Aniacam y Faconauto cifran en 600 millones de euros los beneficios del Plan200E y piden su prórroga

MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Plan 2000E de ayudas directas a la compra de vehículos ha generado ingresos y beneficios sociales de más de 600 millones de euros, indicaron hoy las asociaciones de importadores (Aniacam) y concesionarios (Faconauto), que pidieron al Gobierno la renovación de este programa para evitar un nuevo desplome del mercado automovilístico.

Las dos patronales recuerdan que España tiene el parque automovilístico más antiguo de Europa por detrás sólo de Grecia, con una media de 13,4 años. Ante esta situación, el Plan 2000E ha permitido la retirada de 200.000 vehículos obsoletos, lo que supone un ingente ahorro por los accidentes de tráfico y por la reducción del consumo de carburante y de emisiones de CO2.

En opinión de ambas organizaciones, este programa tiene un balance neto muy favorable para la Administración, que compensa su aportación con la mayor recaudación mediante IVA y otros impuestos. De hecho, recuerdan que el propio Ministerio de Industria admite que el costo del plan es sólo del 10% de la partida asignada.

Por ello, Aniacam y Faconauto sostienen que el Plan 2000E no es una subvención, sino una acción dinamizadora que no comporta costo alguno y que ofrece ventajas y beneficios sociales. La desaparición del plan, en caso de no renovarse, va a provocar una caída "espectacular" de las vetas de coches y una destrucción de empleo.

Ambas asociaciones temen que la desaparición de los 420 euros del IRPF y la subida del IVA en dos puntos (que supone una subida del precio de los vehículos de unos 500 euros por unidad) agudicen las caídas del mercado automovilístico, en el caso de que no se renueve el programa de ayudas.

"Si el principal sector industrial del país, que representa el 10% del empleo y el 5% del PIB, se hunde, va a ser aún más difícil superar la crisis y seguir el tren de recuperación que está empezando la UE", concluye un documento suscrito por los presidentes de Aniacam y Faconauto, Germán López Madrid y Antonio Romero-Haupold, respectivamente.