INGOLSTADT (ALEMANIA), 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
La marca alemana de automóviles Audi, filial del consorcio Volkswagen, registró un beneficio neto de 930 millones de euros durante los seis primeros meses del año, lo que supone un aumento del 37% respecto al resultado neto de 679 millones de euros logrado en los mismos meses de 2007, informó la compañía.
El presidente de la empresa, Rupert Stadler, explicó que este aumento de su beneficio durante el primer semestre del año pone de manifiesto la fortaleza de Audi, a pesar de las dificultades económicas y, en especial, por la fortaleza del euro frente al dólar.
Entre enero y junio de este año, firma automovilística de los cuatro aros logró una facturación de 17.387 millones de euros, lo que supone igualar las cifras obtenidas en el mismo semestre del año anterior (+0,1%).
Asimismo, el resultado antes de impuestos de la compañía con sede en Ingolstadt se situó en 1.372 millones de euros hasta junio, lo que se traduce en un aumento del 204,2% en comparación con los 1.105 millones de los seis primeros meses del año anterior.
Las ventas mundiales de la compañía en el primer semestre alcanzaron 640.676 unidades, lo que representa un aumento del 0,3% respecto a los datos de 2007. Este incremento se ha producido especialmente por las ventas en mercados fuera de Alemania, que crecieron un 3,2% en este periodo, hasta 393.807 unidades.
La compañía indicó que este volumen de matriculaciones está en línea con el objetivo fijado por Audi para el cierre del presente ejercicio de alcanzar unas ventas de más de un millón de unidades en todo el mundo. Para ello, la empresa está ampliando su gama de producto con nuevos modelos, como el nuevo A4 o el Q5. Para la segunda mitad del ejercicio, el director financiero de la empresa, Axel Strotbek, indicó que la intención de la marca es continuar con los elevados registros de rentabilidad y retorno experimentados en los primeros seis meses del año, para lo que tendrá que luchar contra las dificultades económicas existentes.
Strotbek explicó que durante el segundo semestre del año la facturación de la multinacional se verá afectada por el efecto negativo del tipo de cambio entre euro y dólar.
