Actualizado 07/01/2007 13:22

Economía/Motor.- El Gobierno reformará "en un futuro próximo" la fiscalidad del automóvil con criterios medioambientales

MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno tiene previsto llevar a cabo "en un futuro próximo" una reestructuración de la fiscalidad que incide sobre los medios de transporte "desde una perspectiva medioambiental", informaron a Europa Press en fuentes oficiales.

La reforma de la fiscalidad del automóvil se concretará con toda probabilidad a lo largo de este año, durante el que el Ejecutivo ha considerado conveniente prorrogar el Plan Prever "mientras se definen los criterios de esta reestructuración", para proceder posteriormente a la supresión definitiva de este programa el 1 de enero de 2008.

El Gobierno considera además que el Plan Prever ha cumplido sus objetivos, ya que las operaciones que se han acogido a este programa han sido numerosas, si bien considera que su impacto actual es muy limitado. Un total de 3,57 millones de vehículos se han acogido a los planes Prever y Renove desde que se pusieran en marcha estos programas de ayuda al achatarramiento en el año 1994 hasta el cierre de 2006.

El último Consejo de Ministros de 2006 acordó prorrogar el Plan Prever a 2007, pero eliminando las ayudas para la compra de coches usados de menos de cinco años, excluyendo a los vehículos de más de 2.500 centímetros cúbicos y suprimiendo la subvención de 721,21 euros para el cambio de un vehículo que utilizara gasolina con plomo.

En cuanto a las medidas concretas de la futura reforma fiscal del automóvil, en diferentes medios se especula con la posibilidad de que el Gobierno eleve el Impuesto de Matriculación hasta el 17% para los vehículos con una cilindrada de más de 2.500 centímetros cúbicos. Este gravamen es competencia de las comunidades autónomas.

Desde la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), rechazan esta eventual iniciativa y abogan por ligar la fiscalidad a las emisiones de CO2 de los vehículos. En este sentido, la patronal pide eliminar el Impuesto de Matriculación para los coches que emitan menos de 120 gramos de CO2 por kilómetro, y reducirlo para los de menos de 140 gramos.

Según Anfac, la subida del Impuesto de Matriculación a los vehículos de gran cilindrada sólo afectaría a 90.000 automóviles, mientras que referenciar el gravamen a coches que emitan menos de 140 gramos de CO2 por kilómetro beneficiaría a más de medio millón de unidades.

Además, la organización calcula que si se eleva del 12% al 17% el Impuesto de Matriculación para los vehículos de más de 2.500 centímetros cúbicos, el coste para los consumidores aumentaría en 2.200 euros por coche, hasta un total de 220 millones de euros.

Anfac cifra en 22.180 millones de euros la recaudación fiscal correspondiente a 2006 por impuestos sobre la adquisición y el uso de vehículos, lo que supone un aumento del 2,2% en relación con el ejercicio precedente.