BARCELONA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
La empresa automovilística Seat liderará un proyecto de investigación para la búsqueda de nuevos materiales de acero más resistentes, en el que participarán otras quince empresas y cinco centros tecnológicos. El proyecto, impulsado por el Centro Tecnológico de Manresa (CTM), ha obtenido una subvención de 30 millones de euros del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, informó hoy el CTM.
El proyecto de Seat tiene como finalidad avanzar en la construcción de componentes con aceros de alta resistencia mecánica que permitan reducir el peso de los vehículos y, por tanto, el consumo de combustible, sin menoscabo de la seguridad.
El proyecto se centrará en un principio en la industria de la automoción, aunque se prevé que en el futuro se puedan aplicar sus resultados a otros ámbitos, como contenedores para el transporte marítimo y terrestre, estructuras de vehículos pesados (grúas, tractores y camiones), componentes metálicos en transporte ferroviario, herramientas para cortar y, en general, todos aquellos materiales que necesiten de una óptima relación resistencia-peso.
Junto a Seat participan en el proyecto de I+D otras cinco grandes empresas, como Gestamp, Grupo Antolín, Batz y Viza; y otras nueve pequeñas y medianas, como Mikalor, Rowalma, Laneko, Denn y Candemat, entre otras.
También tomarán parte cinco centros de investigación de tres comunidades autónomas: el AIMEN de Galicia, el AIN de Navarra y, en Cataluña, al margen del CTM, la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) y el Centro Tecnológico de la Asociación Catalana de Moldistas y Matriceros (ASCAMM), situado en Cerdanyola del Vallés (Barcelona).
El CTM propuso a Seat que liderara el proyecto, buscó a continuación la implicación de otras empresas y centros de investigación, y lo presentó al programa Cénit del Ministerio de Industria.
El proyecto de Seat es uno de los 16 aprobados por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI). Este organismo, adscrito a Industria, subvencionará con 200 millones de euros, en cuatro años, a dieciséis grandes proyectos empresariales de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i). La apuesta pública generará una inversión privada de 230 millones.
