MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fabricante checo de automóviles Skoda, filial del grupo alemán Volkswagen aumentó sus ventas un 15% en los nueve primeros meses del año, pero redujo un 13% su beneficio operativo en el mismo período, informó la empresa.
En concreto, Skoda obtuvo un beneficio operativo de 455 millones de euros entre los pasados meses de enero y septiembre, lo que se traduce en una disminución del 13,4% respecto al mismo período del ejercicio precedente.
La compañía justificó este descenso por los efectos negativos derivados de la apreciación de la corona checa, de la intensificación de la competencia y del descenso de la demanda, propiciado por la crisis de los mercados financieros.
SE DESACELERAN LAS VENTAS.
Pese al descenso de sus ganancias, Skoda elevó un 14,8% sus ventas en los nueve primeros meses del año, hasta 530.924 unidades. En todo caso, este crecimiento es menor del registrado al cierre del primer semestre, cuando las entregas de la firma crecieron un 17,9%, debido a la incertidumbre que la crisis genera en los consumidores.
La cifra de negocio de la multinacional checa se situó en 158.100 millones de coronas checas (6.450 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, lo que representa una disminución del 2,2% en comparación con el mismo período de 2008, debido precisamente a la apreciación de la corona checa.
REVISION DE LAS INVERSIONES.
En este sentido, el responsable de Comercio de Skoda, Holger Kintscher, reconoció que la apreciación de la moneda checa está afectando de forma negativa a los planes de expansión de la compañía, que ha decidido revisar sus programas de inversión.
"La situación continúa empeorando: los conocidos problemas del precio del acero y de otras materias primas se agravan con la crisis financiera global y con una caída de la demanda de automóviles en todo el mundo", concluyó.
