DETROIT (ESTADOS UNIDOS), 17 Ago. (EP/AP) -
El tribunal de bancarrota ha retrasado hasta mañana la audiencia en la que dará una respuesta a la petición del fabricante de componentes para automóviles Delphi sobre el plan de reestructuración de la compañía en el que se recoge una reducción de la plantilla y de las compensaciones por jubilación.
La empresa con sede en la localidad estadounidense de Troy en el Estado de Michigan anunció hoy que la vista, que estaba prevista para las dos de la tarde hora local, había sido pospuesta hasta las diez de la mañana del viernes.
El tribunal tenía previsto mantener una reunión con todas las partes implicadas en el conflicto de la antigua filial del mayor fabricante de automóviles del mundo, General Motors. Sin embargo, estas reuniones y la posterior resolución sobre la situación de Delphi, que se encuentra en un grave estado económico desde hace casi un año, se han pospuesto por segunda vez en una semana.
Esta modificación del horario en el que se haría pública la decisión del tribunal se debe a que General Motors continúa las negociaciones con los sindicatos de la compañía y con los representantes de los trabajadores temporales con el fin de alcanzar un acuerdo.
Los sindicatos han amenazado con acudir a la huelga si no se llega a una solución satisfactoria para todos, lo que, según los directivos de General Motors, tendría una gran repercusión sobre su compañía, ya que en la actualidad Delphi es el mayor proveedor de componentes de General Motors.
La pasada semana el presidente del fabricante de automóviles, Rick Wagoner, indicó que se estaba progresando en las negociaciones entre todas las partes implicadas, aunque resaltó que se necesitaría tiempo para alcanzar un acuerdo definitivo.
Por este motivo, la resolución del tribunal de bancarrota, que estaba prevista inicialmente para el pasado viernes, fue retrasada hasta hoy, ya que Delphi solicitó más tiempo para llegar a un acuerdo con los sindicatos y, de esta forma, evitar una posible huelga.
