DEARBORN (ESTADOS UNIDOS), 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El consorcio automovilístico estadounidense Ford contempla cerrar el próximo ejercicio con unas pérdidas de 250 millones de dólares (196,8 millones de euros al cambio actual) en su división europea, por lo que pospone su objetivo inicial de volver a la rentabilidad en la región en 2015.
Ford, que acaba de presentar su plan estratégico para 2020, señaló que este cambio en sus previsiones para el mercado europeo es consecuencia de la continuada volatilidad de Rusia y del aumento de los gastos en pensiones.
A pesar de retrasar el plazo de la vuelta a la rentabilidad en Europa, la firma del óvalo explicó que está llevando a cabo el plan de transformación adecuado de sus operaciones europeas, ya que se está centrando en los productos, en la marca y en los costes.
El director financiero de la empresa, Bob Shanks, indicó que en 2015 la firma dará el siguiente paso en su plan de transformación a largo plazo que engloba a todas las partes del negocio de Ford a la hora de abandonar los 'números rojos'.
"Aunque nos enfrentamos a una variedad de retos en nuestro acercamiento a 2015, estamos bien posicionados para lograr un crecimiento a largo plazo en todas las áreas de nuestro negocio", añadió el directivo.
2020.
El plan estratégico de la empresa para 2020 contempla medidas para aumentar sus ventas mundiales de vehículos y el margen operativo de su división de Automoción. La compañía también trabaja para lograr un mayor reparto de sus beneficios entre las regiones.
Para final de década, Ford prevé alcanzar un volumen anual de matriculaciones mundiales de 9,4 millones de unidades, lo que supondrá un aumento de entre el 45% y el 55%, mientras que su margen operativo será del 8%.
El presidente y consejero delegado de la empresa, Mark Fields, afirmó que el plan a largo plazo de la firma refuerza el compromiso con el programa 'One Ford'. "Seguimos completamente centrados en ofrecer a los clientes la gama de vehículos más actual para satisfacer sus necesidades", añadió.
Ford estima que en 2020 todas sus áreas de negocio de automoción y Ford Credit contribuyan a la rentabilidad de la empresa y para esa fecha la previsión es que el volumen de 'breakeven' se sitúe en dos tercios de las ventas totales.
El plan para 2020 de Ford cuenta con que el 99% de las ventas mundiales de la empresa corresponda a vehículos fabricados con nueve plataformas para 2016, mientras que el gasto anual ascenderá a 9.000 millones de dólares (7.086 millones de euros) en comparación con los 6.600 millones de dólares (5.196 millones de euros) de 2013.
Por otro lado, la compañía tiene el objetivo de reinventar la marca Lincoln, que pasará a vender 300.000 unidades al año en 2020, lo que supondrá triplicar su volumen comercial, gracias a su prevista entrada en China y al aumento de su cobertura de mercado.
2014.
La empresa estadounidense señaló que 2014 será un año clave en el plan 'One Ford', que contempla el lanzamiento de 23 modelos. No obstante, la empresa se ha visto obligada a rebajar a 6.000 millones de dólares (4.724 millones de euros) su previsión de beneficio bruto en 2014, en comparación con su objetivo inicial de ganar entre 7.000 y 8.000 millones de dólares (entre 5.511 y 6.299 millones de euros).
Ford destacó que esta previsión de beneficio antes de impuestos no incluye efectos extraordinarios como el aumento del coste de la garantía, aunque sí contempla los costes derivados de las llamadas a revisión llevadas a cabo por la empresa y los bajos volúmenes de ventas experimentados en Sudamérica y Rusia.
Para 2015, la corporación de Dearborn (Michigan) continuará con su ofensiva de producto, con el lanzamiento de 16 vehículos en todo el mundo y prevé obtener un beneficio bruto de entre 8.500 y 9.500 millones de dólares (entre 6.692 y 7.480 millones de euros), al tiempo que contempla mejorar su facturación y su margen operativo.
