Actualizado 09/09/2008 19:41

Innova.- La UMU prevé colaborar en un estudio para detectar problemas de calidad y cantidad en el semen de los murcianos

MURCIA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -

El grupo de investigación sobre Salud Pública y Epidemiología de la Universidad de Murcia (UMU) prevé estudiar la calidad y cantidad del semen de jóvenes murcianos para compararla con la de otros chicos de la misma edad de Rochester (Estados Unidos) y Copenhague (Dinamarca), según informó a Europa Press el doctor y experto en fertilidad humana, Jaime Mendiola.

La idea es "comprobar si la calidad seminal está bajando en la Región más de lo normal, para prevenir y dar consejos a los jóvenes que lo padezcan, decirles que se cuiden más". Así, el estudio, que servirá igualmente para establecer una comparativa entre Europa y Estados Unidos, se encuentra todavía en fase de pedir financiación.

En concreto, la UMU realizará esta investigación en colaboración con The Center for Reproductive Epidemiology de la Universidad de Rochester en Nueva York y el departamento de Endocrinología del hospital de Copenhage (Dinamarca), apuntó Mendiola, quien viajará próximamente a Estados Unidos para la realización de una estancia posdoctoral.

Mendiola trabajará durante su estancia en el exterior con la profesora de Obstetricia y Ginecología, Shanna Swan, directora del The Center for Reproductive Epidemiology de la Universidad de Rochester, quien hoy ofreció una conferencia en la facultad de Medicina de la UMU.

La profesora Swan, considerada una de las primeras especialistas en estos temas, habló sobre las causas de la variabilidad en la concentración de esperma. "Ella se dedica a estudiar como pueden influir exposiciones a tóxicos, lo que comemos, o exposiciones ocupacionales a la calidad del semen o la exposición que tienen las mujeres cuando están embarazadas, entre tras cosas", indicó Mendiola a esta redacción.

En concreto, en su charla señaló que "hace unos años hizo una revisión para analizar la variación en la calidad del semen, que en los últimos 50 años ha bajado un 50 por ciento, es decir, un uno por ciento cada año", para lo que Swan realizó un meta análisis de 101 estudios europeos, americanos y de otros sitios del mundo.

En este sentido, constató que la calidad seminal de los hombres "está bajando", algo en lo que influyen "posiblemente exposiciones ocupacionales, como exposiciones a disolventes, a metales pesados, a contaminantes ambientales, el estrés, contaminantes ambientales como las dioxinas, y características como la obesidad, el alcohol y el tabaco, entre otros".

En una segunda parte, Swan comentó que, en Estados Unidos, "ha hecho muchos trabajos para ver si había diferencias geográficas en la calidad seminal de la gente, para lo que investigó en Missouri, Minnesota". Precisamente sobre este aspecto es en el que la UMU prevé colaborar con Swan para "implementar una serie de estudios como está haciendo ella".

En este sentido, dijo que "hay estudios preliminares pero queremos ver como va aquí en España", para lo que colaborarán conjuntamente con la universidad danesa y estadounidense. Y es que "hay países del norte de Europa en los que el 40 por ciento de los jóvenes entre 18 y 22 años tienen una calidad por debajo de lo que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS)".

El estudio que Swan hizo en Minnesota y Missouri, comprobó que "uno de los estados vivía fundamentalmente de la agricultura, y el otro era más urbano, así como que había diferencias significativas en la calidad seminal". Así, en la parte de Missouri "había peor calidad seminal, y alrededor de un 60 por ciento estaba dedicado a la agricultura, mientras que en Minnesota solo era de un 20 por ciento".

En este sentido, Swan realizó un estudio relacional y constató que "había claras diferencias en exposiciones a pesticidas relacionados con la agricultura, principalmente", lo que le indujo a pensar que este factor se encontraba en el origen del problema.

CARNE DE TERNERA

La profesora estadounidense habló también de una de sus más recientes publicaciones, un artículo "en el constató algo curioso, y aque examinó en una clínica de fertilidad que había pacientes que tenían peor calidad seminal, y comprobó que, cuando sus madres estaban embarazadas, comían más ternera que el resto".

Al respecto, averiguó que las madres que habían comido mucha ternera durante el embarazo --más de siete veces a la semana-- sus hijos "tuvieron más probabilidad de tener baja calidad seminal".

La hipótesis que manejó Swan es que en Estados Unidos "todavía se utilizan hormonas para hacer crecer al ganado, algo que aquí, en Europa, está prohibido desde hace unos 20 años". Swan manejó la hipótesis de que, como esas madres comieron tantas hormonas por la carne, pudieron afectar al desarrollo del bebé cuando estaba en el útero.

Específicamente, la profesora centró su investigación en la menor concentración de semen, y se trató, a juicio de Mendiola, de un estudio sobre un asunto "muy en boga, puesto que la exposición en el útero, prenatal, puede tener una importante influencia en el individuo y, en concreto, en la calidad del semen".

Por último, Mendiola destacó que todos estos estudios "no son fruto de experimentaciones con humanos, cosa que no podemos hacer, sino que las investigaciones consisten en asociaciones, relacionamos cosas, se hacen estudios epidemiológicos y estadísticos para comprobar que hay una buena asociación".