MURCIA, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, aseguró que "la única plaga que tiene a día de hoy el río Segura se llama Partido Socialista", al tiempo que reprochó a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) que "se dedique a la política ficción y al azote con la escasez de agua de la cuenca y de los regantes".
En respuesta a la nota que remitieron los responsables del organismo de cuenca, en la que se califica de "irresponsable" un acto de regantes, celebrado el pasado viernes en Orihuela (Alicante) y apoyado por el PP, en el que se arrojó al río Segura agua del Ebro "contaminada con miles de larvas de mejillón cebra", Cerdá lamentó la "hipocresía" y falta de rigor técnico" de los responsables de la Confederación.
Y es que, a su juicio, estos responsables "se dedican más a la política ficción, a la calamidad y al azote que a resolver los problemas reales y la escasez de agua que sufren los agricultores", y recordó que la cuenca del Segura "es la única con déficit estructural de España", por lo que sostuvo que "la única solución pasa por los trasvases, negados constantemente por el PSOE".
Igualmente, recordó que "la plaga socialista paró las obras del trasvase del Ebro por el ultimátum de ERC y parece que ahora les molesta que los agricultores reivindiquen aquello que necesitan".
Por todo ello, calificó de "plaga" los "trasvases cero" del Tajo que "han sufrido los regantes murcianos en los tres últimos años hidrológicos", al tiempo que puso de manifiesto que "los embalses de cabecera almacenan hoy mucha más agua de la que han trasvasado los socialistas para la agricultura en esta legislatura".
Consideró, por tanto, que el acto del pasado viernes "representa la realidad a la que nos ha condenado el PSOE: al agua embotellada, tal y como promulgan públicamente tanto el candidato murciano del PSRM-PSOE, Pedro Saura, como el candidato socialista y actual presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda".
Por último, confió en que "los socialistas no desvíen la atención sobre la realidad de un problema que azota la agricultura y futuro y no utilicen las instituciones para intentar engañar a la población, tal y como hicieron con los informes que manipularon sobre el trasvase del Ebro".
