ALICANTE, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, se ha mostrado satisfecho este jueves en Alicante por el "consenso básico" que se ha cerrado en torno a la planificación hidrográfica de los ríos españoles y ha confiado en que "en la siguiente fase de planificación, se logre un consenso absoluto" que permita abordar un Plan Hidrográfico Nacional.
Arias Cañete se ha referido así al ser preguntado por los medios sobre la revisión de los planes de cuenca de los ríos antes de participar en la jornada 'Estrategia de recursos hídricos en España' organizada por Casa Mediterráneo en el Real Liceo y Casino de Alicante.
El ministro ha recordado que España debería haber finalizado la planificación hidrológica en 2009 y el año que viene haber abordado la primera revisión y, sin embargo, "con ocho años de gobierno socialista no se pudo culminar", lo que ha obligado a "en dos años, muy intensos de trabajo, ir cerrando los planes hidrográficos de todos los ríos que son competencia" del Estado.
Arias Cañete ha destacado que el proceso ha sido "lento", "laborioso", de "mucho diálogo" y de "participación pública", en el que se ha buscado "los máximos niveles de acuerdo". Como ejemplo, ha hablado de la situación del Tajo, "con un acuerdo básico" de todas las comunidades para regular el trasvase hasta el Segura desde "condiciones de seguridad jurídica, transparencia y aplicación rigurosa de criterios técnicos".
Además, ha recordado que "hemos logrado cerrar el Ebro, no sin problemas, porque de las nueve comunidades autónomas, ocho estaban de acuerdo y Cataluña no, por el nivel del caudal ecológico en la desembocadura del Delta. Y hemos logrado cerrar ríos como el Júcar".
Precisamente sobre esta cuenca, Arias Cañete ha señalado que se ha tratado de una negociación complicada porque "hay que poner de acuerdo a los regantes de Valencia y Alicante", además de los regantes de otras comunidades autónomas.
"GRAN ESFUERZO"
"Creo que se ha hecho un gran esfuerzo en la búsqueda del máximo consenso y la máxima racionalidad" porque, según ha concretado el ministro, se está administrando un recurso "escaso" que en la Comunitat Valenciana se utiliza de manera "muy eficiente" y económicamente "rentable" y donde las "presiones para utilizar el recurso son más altas que en otras comunidades".
