Un individuo se enfrenta este miércoles a diez años de cárcel por agredir y vejar a su pareja

Actualizado: miércoles, 3 diciembre 2014 4:37

MURCIA, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio Fiscal ha pedido 10 años de cárcel para R.R. por agredir y someter a un trato vejatorio a su pareja, con la que convivía desde hacía tres años, en Totana. El juicio se celebrará este miércoles, en la sección tercera de la Audiencia Provincial, a partir de las 10.00 horas.

Según el escrito del fiscal, al que ha tenido acceso Europa Press, el trato al que era sometido la víctima, "vejatorio y humillante", estaba motivado por los celos y que muchas veces se manifestó en episodios de agresión, como puñetazos, bofetadas, tirones de pelo y hacerle comer tierra, acompañado de insultos y menosprecios.

Los comportamientos controladores del acusado también eran frecuentes hasta el punto de que no permitía a su pareja que se relacionase con otras personas o mantuviese contacto con su familia, impidiendo que saliera a la calle o fuera a trabajar hasta que se curasen las lesiones que le quedaban como consecuencia de las agresiones físicas sufridas.

Igualmente, el procesado para evitar que su pareja le denunciase o pusiera fin a la relación con la finalidad de amedrentarla le decía que en el caso que lo hiciera acabaría con su vida.

La situación culminó el pasado 25 de mayo de 2013, cuando pasada la medianoche llegaron a su domicilio y comenzaron una discusión motivada por los celos, ya que la víctima había recibido una llamada del padre de sus hijos.

Tras encerrarse para evitar que le pegara, el acusado rompió el cristal de la puerta logrando abrirla y entrar en la casa, de manera que se abalanzó hacia ella y la tiró en el suelo, apretándole el cuello con las manos mientras le decía "te voy a matar, quien va a reclamar por ti".

En ese momento, cogió del suelo un trozo de cristal con el que le pinchó en el costado derecho, ocasionándole, según el forense, una herida no penetrante en el hemotórax izquierdo. A continuación, le cortó en la cara con el mismo cristal mientras le advertía que le iba a "destrozar la cara".

La víctima, en un descuido del agresor, consiguió escapar y fue auxiliada por unos vecinos. Como consecuencia de las heridas, quedó ingresada seis días y tardó en curarse 55 días, de los que 30 fueron de impedimento para sus ocupaciones habituales.

Del informe pericial de los equipos técnicos de las Unidades de Valoración Forense Integral de los Juzgados de Violencia sobre la Mujer de Madrid se desprende que en la víctima se aprecia una grave situación de violencia habitual desde el inicio de su relación que ha provocado en la misma un trastorno por estrés postraumático, que requiere para su recuperación intervención profesional especializada.

Para el fiscal los hechos son constitutivos de un delito de violencia habitual, por el que pide tres años de prisión y privación del derecho a la tenencia y porte de armas por cuatro años; de lesiones, por el que reclama seis años de cárcel; y de malos tratos en el ámbito familiar, por el que pide un año de cárcel.

Asimismo, deberá indemnizar a su pareja en 2.790 euros por las lesiones causadas, en 9.000 euros por las secuelas producidas y en 3.000 euros por los daños morales.