Izquierda Unida denuncia el abandono que padece la pedanía de Patiño por parte del Ayuntamiento de Murcia

Actualizado: sábado, 10 febrero 2007 21:19

MURCIA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -

Izquierda Unida del Municipio de Murcia denunció hoy el "abandono" que padece la pedanía de Patiño, "en la que no se invierte en servicios sanitarios, instalaciones deportivas, políticas de integración, entre otras necesidades", según informó la corporación política en una nota de prensa.

Por estas y otras deficiencias, Izquierda unida afirma en la citada nota que se han visto obligados a denunciar la conducta del Ayuntamiento "más ocupado en ayudar a sus amigos los constructores que de mejorar las pedanías y los barrios".

Respecto a los servicios sanitarios de la zona, IU destaca que el consultorio médico es una edificación deteriorada en la que solamente trabajan dos médicos, "pese a que atiende a las crecientes poblaciones de Patiño, Barrio del Progreso y Carretera de Santa Catalina, por lo que estamos ante un claro ejemplo de masificación, a lo que hay que añadir que su sistema no está informatizado, lo que ralentiza el trabajo de sus profesionales".

Por otra parte, la nota de prensa señala que la inversión en instalaciones deportivas y culturales para los jóvenes "es nula". A lo que añade que Patiño cuenta con un Centro Cultural desprovisto de biblioteca y lugares públicos que puedan albergar actividades deportivas para los jóvenes, "por lo que su única alternativa es ocupar las pistas de los centros educativos".

Asimismo, IU denuncia que la pedanía carece de políticas de integración para los colectivos de inmigrantes y de etnia gitana, quienes se agrupan para establecer su residencia en zonas con viviendas de alquiler o deshabitadas, "lo que supone un serio riesgo de creación de guetos que sean en el futuro origen de inseguridad ciudadana".

El índice de fracaso escolar en la pedanía es muy alto según el partido político, lo que se relaciona con la ausencia de políticas de integración para la adaptación de niños inmigrantes para que no se originen conflictos que empujen a muchos padres a cambiar a sus hijos de colegio.

En cuanto al transporte público, la Línea 29 "no busca prestar un servicio público, sino ser rentable, ya que los vehículos están viejos y deteriorados, a lo que se suma que los usuarios tienen que esperar el autobús un mínimo de media hora durante la semana y una hora los fines de semana".