El Plan Operativo ante nevadas dispondrá este año de 10 camiones quitanieves y 2.200 toneladas de fundentes

El delegado del Gobierno posa con servicios de asistencia
DELEGACIÓN DEL GOBIERNO
Actualizado: martes, 16 noviembre 2010 18:09

En la campaña anterior se utilizaron 1.082 toneladas de fundentes y 553.000 litros de salmuera

MURCIA, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

El delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, y el Jefe de la Demarcación de Carreteras del Estado, Angel García Garay, han presentado hoy el Plan Operativo de Coordinación ante nevadas que puedan afectar a la Red de Carreteras del Estado en la Región de Murcia en 2010, que ha habilitado 2.200 toneladas de fundentes y prevé la participación de diez camiones quitanieves, cuya actividad y situación se controlará por GPS.

El acto ha tenido lugar en la nave de Conservación que el Ministerio de Fomento tiene en Murcia y al mismo han asistido como integrantes del Plan la unidad de Protección Civil de la Delegación del Gobierno, la Guardia Civil, la Demarcación de Carreteras del Estado en Murcia, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y la Unidad Militar de Emergencias.

González Tovar ha recordado que el mencionado Plan tiene una mayor incidencia en los cinco meses que van de noviembre a marzo, periodo en el que hay mayores posibilidades de incidencias en la Red de Carreteras del Estado a causa de la nieve o de que las bajas temperaturas den lugar a la aparición de placas de hielo.

No obstante, el Protocolo de Coordinación de Actuaciones de los Órganos de la Administración General del Estado ante nevadas y otras situaciones meteorológicas extremas en la Red de Carreteras del Estado, está operativo de forma permanente, según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno en un comunicado.

En cuanto a los medios materiales y humanos que el Ministerio de Fomento pone este año a disposición de las carreteras regionales para afrontar emergencias por episodios de nevadas intensas son diez camiones quitanieves, con tracción a las seis ruedas, y provistos de esparcidor de fundentes y cuchilla quitanieves.

Asimismo, dispondrá de dos almacenes de fundentes de 300 metros cuadrados y un tercero de 150 metros cuadrados, con un acopio total de 2.100 toneladas de sal, así como dos silos de sal, de 100 y 10 toneladas, dos depósitos de salmuera de 10.000 litros, tres extendedores de salmuera de 10.000 litros, tres estaciones meteorológicas fijas y tres móviles.

Respecto a los vehículos participantes en las tareas de vialidad invernal, el delegado del Gobierno ha informado que "todos están equipados con dispositivos de seguimiento por GPS que permiten el seguimiento de los itinerarios y el análisis de las actuaciones llevadas a cabo actuar de la forma más eficaz en función de las necesidades del episodio. Además, este proceso está permanentemente controlado mediante soporte web y la información se obtiene en tiempo real".

Además, los almacenes de sal y las plantas de suministro de salmuera están situadas estratégicamente con el fin de atender los tramos en que son más frecuentes los episodios de nieve y reducir el tiempo de recarga de las quitanieves, optimizando así los tratamientos.

El delegado del Gobierno ha subrayado que esta campaña se tiene almacenada el doble de lo consumido en la campaña anterior y ha hecho hincapié en la importancia que tiene dejar libre el carril izquierdo durante la nevada para que puedan operar las quitanieves.

PUESTA A PUNTO

Dentro del Plan, una de las tareas ha sido la revisión y puesta a punto los equipos de vialidad invernal disponibles para que su funcionamiento sea correcto en la fase de operación, siguiendo las recomendaciones de los fabricantes a todos los niveles, como el engrasado, la sustitución de latiguillos y las pruebas de funcionamiento de sistemas hidráulicos, entre otras cosas.

Igualmente, se han preparado las existencias de fundentes hasta completar las 2.200 toneladas, y se han probado los equipos GPS de todos los vehículos. Además, se ha procedido a la apertura preventiva de los pasos de mediana más estratégicamente situados en la red, para facilitar el recorrido de los camiones.

Sobre los tratamientos que se llevan a cabo sobre la carretera cuando la climatología es adversa, González Tovar ha señalado que son de dos tipos: "preventivos, cuando aún no ha empezado la nevada, y curativos, cuando aquella ya se ha producido, pero se desea evitar que la nieve se transforme en placas de hielo".

El tratamiento preventivo consiste en el extendido de, entre 5 y 20 gramos por metro cuadrado de sal o de salmuera, según la humedad del pavimento, en todos los tramos de carretera en los que exista una humedad superior al 75 por ciento y se prevea un descenso de temperatura por debajo de los tres grados centígrados. Normalmente, explicó que estos tratamientos se realizan al atardecer, antes de que tenga lugar el descenso de temperaturas durante la noche.

Los tratamientos curativos son más enérgicos y consisten en el extendido de entre 20 y 40 gramos por metro cuadrado de fundentes en las zonas nevadas, a fin de bajar el punto de congelación y evitar la aparición de las placas de hielo, que suponen un gran peligro para la circulación.

El fundente habitual es el cloruro sódico, si bien, cuando la temperatura baja por debajo de los cinco grados bajo cero, resulta necesario mezclar cloruro cálcico con la sal común a fin de hacer más eficaz el tratamiento, ya que es efectivo hasta los 15 grados centígrados bajo cero.

Con el fin de hacer más eficiente la acción de los fundentes sobre la calzada y evitar que las ruedas de los vehículos los proyecten fuera de la carretera, se añade agua a la sal, formando salmueras que se adhieren mejor al pavimento.

La acción de los fundentes se complementa con el trabajo de las cuñas quitanieves, que se montan sobre el mismo camión esparcidor, que se desplaza a una velocidad de 60 kilómetros por hora, y evita la acumulación de nieve sobre la calzada.

Además, el delegado dijo que se presta especial atención a las zonas de umbrías, donde es más probable la formación de placas de hielo en presencia de bajas temperaturas.

En los tratamientos preventivos contra los episodios de hielo y nieve que se realizaron en la campaña anterior se emplearon más de 1.082 toneladas de cloruro sódico (sal común) y 553.000 litros de salmuera, recorriéndose más de 11.660 kilómetros por los vehículos implicados en la campaña.