Valcárcel defiende en un artículo publicado en prensa que "los trasvases son de España a España"

Actualizado: domingo, 21 marzo 2010 11:52

MURCIA, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, defiende en un artículo publicado hoy en prensa que "los ríos son de todos los españoles" y que, por tanto, "los trasvases no se realizan entre cuencas hidrográficas, ni entre comunidades autónomas, sino que son de España a España", según informaron fuentes del Gobierno regional en un comunicado.

Así, en el texto, publicado con motivo del primer aniversario de la gran manifestación en defensa del Tajo-Segura que reunió por las calles de la capital de la Región a más de 400.000 personas de la Comunidad de Murcia y de las provincias de Alicante y Almería, el jefe del Ejecutivo murciano reclamó al Gobierno central "la distribución equilibrada y solidaria de los recursos hídricos entre todos los españoles, conforme a lo establecido por nuestra Constitución".

Valcárcel, que calificó el trasvase de "infraestructura vital que lleva 31 años generando progreso y riqueza para todo el país", afirmó que "seguimos atónitos ante la capacidad del presidente José Luis Rodríguez Zapatero para abstraerse de los problemas y seguir mirando hacia otro lado en asuntos que son de su estricta competencia".

EL AGUA ES DE TODOS

De este modo, el jefe del Ejecutivo regional remarcó que "quien debe garantizar el reparto solidario del agua es el presidente del Gobierno, es decir, el presidente de todos los españoles".

Y es que, según argumentó, "José Luis Rodríguez Zapatero es quien debe resolver este desorden hídrico desde la sensatez y desde la coherencia que dicta que el agua es de todos", y subraya que "cuando se plantea un trasvase de agua para llevarla desde donde sobre a donde no la hay, no se está quitando a unos para dar a otros, sino que se está redistribuyendo para hacer llegar ese recurso clave a todos".

Por otro lado, el presidente de la Comunidad señaló que "lo último que necesita España, especialmente ahora, inmersa en la más grave crisis económica de su historia, es que la guerra de las competencias autonómicas vaya a más", y por ello el presidente del Gobierno central "tiene que devolver a España a la senda constitucional donde la encontró".

Asimismo, Valcárcel sostuvo que "Rodríguez Zapatero debe ejercer las competencias que son exclusivas del Estado y no permitir, bajo ningún concepto, que nada ni nadie injiera en sus deberes legales, y cumplir con su obligación de garantizar la justicia y la igualdad al conjunto de los españoles".

Igualmente, subrayó en su artículo que Zapatero "tiene que empezar por poner coto, sin demora, al caos hídrico nacional que él mismo ha creado y acabar con la pretensión de algunas comunidades de arrogarse competencias del Estado que son indelegables".

LA CONSTITUCIÓN, GUÍA DE GOBERNANZA

Valcárcel apuntó que "el presidente de todos los españoles cuenta con un manual de instrucciones muy claro, la Constitución Española, redactado y aprobado por los representantes del pueblo y que define cuáles son las responsabilidades y obligaciones del jefe del Ejecutivo".

Entre estas responsabilidades, "la Constitución reserva en exclusiva al Estado una serie de competencias que, por su trascendencia y repercusión sobre el bien común, son indelegables en otros niveles administrativos, y así sucede, por ejemplo, con la defensa de nuestro territorio y con la conservación y equitativo reparto de los recursos naturales y estratégicos del Estado, entre ellos, el agua", indicó.

Además, según explicó, "el problema surge cuando se rebasan los límites de la Constitución o se rebaja el celo sobre lo contemplado en ella", e indicó que "la primera consecuencia es la incertidumbre que se genera entre los ciudadanos, el resto de poderes públicos del Estado y los agentes económicos y sociales".

Por ello, el presidente murciano consideró que "es ese punto en el que desgraciadamente se encuentra España, por la pasividad de Rodríguez Zapatero" y agregó que "el barullo institucional, económico, social y político" que ha creado el presidente "no tiene precedentes en nuestra historia democrática".

Y es que, según reflexionó, "ser presidente del Gobierno de España no es una obligación, sino un privilegio, e implica muchas tareas y responsabilidades, gratas e ingratas, que deben perseguir el mismo objetivo, defender España como un todo, lo que supone otorgar un trato igualitario a todos los españoles y defender por encima de todo el interés general".

Por último, el presidente de la Comunidad destacó que Zapatero "estrenó su andadura en 2004 con una decisión nociva para la estabilidad y la cohesión territorial, la de desmantelar el Plan Hidrológico Nacional, doblegándose a los intereses de quienes le prometían su apoyo parlamentario, y con la que destruyó el consenso logrado en materia de agua después de años de negociaciones".

"Tras ello inició un febril proceso de reformas estatutarias, sin marcar previamente cuáles debían ser los límites de dichas reformas; quien siembra vientos, recoge tempestades, y aquí está el ciclón", finalizó.