11-M (7).- El juez asegura que el Skoda Fabia estuvo controlado en todo momento hasta que llegó a la Policía Científica

Actualizado: martes, 11 abril 2006 22:13

MADRID, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

El juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo subraya, en su auto de procesamiento hecho público hoy contra los supuestos responsables de los atentados del 11-M en Madrid, que el vehículo Skoda Fabia, propiedad de Serhane Ben Abdelmajid Fakhet, "El Tunecino" (uno de los suicidas de Leganés), estuvo bajo control policial en todo momento desde el día 15 de junio de 2004, fecha en que una empresa de alquiler de coches vio que en su interior había algunas cintas en árabe y alertó a los agentes, que lo llevaron a la Policía Científica en la comisaría de Canillas (Madrid).

En este sentido, el juez Del Olmo hace en su resolución una mención específica al interrogatorio realizado a trece personas (empleados de la empresa de alquiler y policías), para determinar las actuaciones que se realizaron sobre el vehículo desde que la empresa de alquiler alertó a la Policía, hasta que fue puesto a disposición de la Policía científica.

En concreto cita las declaraciones de uno de los agentes encargado de entregar el vehículo a la Policía Científica, quien aseguró que "preservaron que nadie accediera al vehículo, ni a su interior ni la carrocería del mismo". Posteriormente, los agentes escoltaron el vehículo hasta la comisaría de Canillas, donde la Policía Científica se hizo cargo de él, donde quedó aparcado.

Aunque este agente no recordaba exactamente si era al subinspector de la Policía Científica a quien se lo habían entregado, el juez se remite en su auto a un informe elaborado por la citada Policía Científica, que asegura que dos inspectores se hicieron cargo de la vigilancia del vehículo cuando llegó a la comisaría.

El coche Skoda Fabia fue localizado el 13 de junio de 2004 en la calle Infantado de Alcalá de Henares (Madrid), a escasos metros del lugar donde fue hallada el mismo 11 de marzo la furgoneta Renault Kangoo, y en él se encontraron restos genéticos de Allekema Lamari y Mohamed Afalah.

En la maleta que había en el coche se encontraron, entre otras cosas, una funda de pistola y varias cintas de cassette llamando a la 'yihad': "Los ocupantes han matado a nuestras familias, a nuestras mujeres e hijas, han destruido nuestro país, y por eso debemos defender nuestra tierra a través de la Yihad (...). Sólo con los disparos se marchará el traicionero".

ROBADO EN BENIDORM

El vehículo Skoda Fabia pertenecía a una empresa de alquiler de coches, y fue robada y fue robada en Benidorm en septiembre de 2003 por Mauricio A.S., quien posteriormente se la vendió a un hombre "de nacionalidad árabe, por su acento", y que finalmente reconoció en fotografías como "El Tunecino".

El 13 de junio de 2004, los agentes encontraron el Skoda Fabia cerca de donde habían hallado la furgoneta Renault Kangoo el 11 de marzo, y dos días después se lo devolvieron a la empresa de alquiler de coches.

El mismo 15 de julio, uno de sus empleados estaba limpiando el vehículo, cuando se dio cuenta de que había una cinta de cassette con caracteres árabes y que había una maleta en el maletero. El empleado llamó a la Policía, que se encargó del vehículo hasta que fue trasladado a la comisaría madrileña de Canillas.

Entre el 26 de noviembre y el 11 de diciembre de 2003 el vehículo recibió cinco multas por aparcamiento indebido, en la Avenida de Bruselas de Madrid, muy cerca del domicilio de "El Tunecino". Además, desde sus alrededores, éste realizó varias llamadas a Jamal Ahmidan y a Mohamed Afalah.

El auto de procesamiento también se refiere al hallazgo de la furgoneta Renault Kangoo, hallada en Alcalá de Henares cerca de las 10 y media de la mañana del mismo día de los atentados, y en el que se encontraron, entre otras cosas, una cinta de cassette con inscripciones en árabe, el extremo de un cartucho de dinamita y una bolsa de plástico azul que contenía detonadores con las huellas del argelino Daoud Ouhnane.

En la furgoneta también se hallaron los rastros genéticos de Asrih Rifaat Anouar, Abdennabi Kounjaa y Allekema Lamari, los tres muertos en Leganés. Además, el juez menciona la declaración de un agente de la Policía, especialista en ETA, que al comprobar la furgoneta, advirtió que "no se daban los elementos exteriores identificativos respecto de la materia de la que es especialista", como tener las matrículas dobladas.