Los 28 reforzarán controles en fronteras exteriores para detectar a yihadistas que vuelven de Siria e Irak

Actualizado: viernes, 3 julio 2015 1:46

Presionarán a la Eurocámara para que apruebe registro de pasajeros aéreos antes de fin de año

LUXEMBURGO, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los ministros del Interior de los 28 han acordado este jueves reforzar los controles en las fronteras exteriores de la UE con el fin de detectar a los yihadistas europeos que vuelven de combatir en Siria e Irak, que constituyen la "principal amenaza" para la seguridad por el riesgo de que cometan ataques terroristas en suelo comunitario.

Los Gobiernos presionarán además a la Eurocámara para que apruebe antes de final de año la creación de un registro europeo de datos de los pasajeros aéreos, similar al que ya existe en Estados Unidos, Canadá y Australia desde los atentados del 11-S. La iniciativa está bloqueada desde hace dos años por las dudas del Parlamento sobre el impacto en la privacidad y la protección de datos.

El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, que ha representado a España en la reunión, ha dicho que el registro de pasajeros aéreos es una herramienta "imprescindible para luchar contra la principal amenaza que tiene en este momento Occidente, y en particular la UE".

También el coordinador antiterrorista de la UE, Gilles de Kerchove, ha dicho que el registro "es uno de los pocos mecanismos que permite detectar viajes sospechosos". "Es posible que pronto nos enfrentemos a muchos retornos desde Siria e Irak, ya que los ataques aéreos pueden incentivar los retornos y debemos estar preparados para detectarlos", ha avisado.

"La actualidad hace más imperiosa la necesidad de dotarse de este instrumento", ha señalado Kerchove. "Todas las partes tendrán que hacer concesiones, pero ni siquiera aceptar la negociación es bastante inusual", ha apuntado el coordinador antiterrorista en referencia al bloqueo de la Eurocámara.

Para Martínez, "lo que hay que hacer es ser suficientemente persuasivos y pedagógicos para que se pueda entender que es perfectamente compatible la garantía de la seguridad, y en este caso de la seguridad de los desplazamientos en el territorio de la UE, con la protección de la intimidad y la protección de los datos".

Los ministros del Interior han acordado implantar progresivamente en las fronteras exteriores de la UE el control electrónico de todos los documentos de viaje de los ciudadanos comunitarios. Es algo que ya permite el código de fronteras de la UE pero que en la actualidad se hace sobre todo de forma visual por parte de los agentes de fronteras.

El objetivo de esta medida es poder cotejar los documentos con la base de datos de Interpol y del Sistema de Información de Schengen para comprobar si han sido robados, o falsificados o incluso retirados, como piensan hacer Alemania, Reino Unido y Francia con sus yihadistas.

Los ministros del Interior han pactado también aumentar los controles para verificar si los ciudadanos europeos que atraviesan las fronteras exteriores están en alguna base policial. Las actuales reglas sólo permiten estos controles de forma no sistemática. Por ello, se ha acordado definir "indicadores comunes" para poder hacer "controles sistemáticos en algunos vuelos" considerados de mayor riesgo.

El secretario de Estado de seguridad ha celebrado estas decisiones porque "España tiene un especial empeño en securizar nuestras fronteras exteriores y en particular las únicas fronteras exteriores que tiene la UE en el continente africano, que son las fronteras terrestres en Ceuta y Melilla".

Finalmente, el ministro italiano del Interior, Angelino Alfano, cuyo país ocupa la presidencia de turno de la UE, ha anunciado que se creará un equipo multinacional con agentes de seguridad de todos los Estados miembros especializados en terrorismo yihadista y su propaganda en Internet.

Kerchove ha cifrado en alrededor de 3.000 el número de ciudadanos europeos que han viajado a combatir a Siria. Algunos han muerto, otros siguen luchando allí y otros ya han regresado. Uno de estos yihadistas fue el autor del ataque contra el Museo Judío de Bruselas, en el que murieron cuatro personas. Bélgica, Alemania, Francia, Holanda, Dinamarca, Suecia, España o Austria son los países más afectados por este fenómeno.

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