Aguirre da por cierto en su biografía autorizada que Gallardón supo la noche anterior lo que iban a hacer Tamayo y Saez

Actualizado: martes, 21 noviembre 2006 22:18

Dice que pidió a Rajoy que metiera en maitines a Gallardón en un libro que revela la encuesta por la que Aznar le hizo alcaldable

MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, da por cierto en su biografía autorizada 'Esperanza Aguirre, La presidenta' que el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón sabía que los socialistas Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez abandonarían la Asamblea de Madrid desde la noche antes de que el hecho se produjese. Además, el libro publica la encuesta sobre Madrid que llevó al ex presidente José María Aznar a convertir a Gallardón en 'alcaldable' y añade que fue Aguirre quien propuso a Mariano Rajoy que incluyera al regidor en sus 'maitines'.

Bajo el epígrafe 'La sombra de Gallardón es alargada', el libro escrito por la periodista Virginia Drake (La Esfera) --cuyo contenido es recogido por Europa Press-- rememora la crisis de la Asamblea y el momento en que Gallardón decide convertirse en presidente en funciones y alcalde a un tiempo, hasta que tuvieran lugar nuevas elecciones en octubre, en las que Aguirre venció ya por mayoría absoluta.

"Alberto tenía que que haber dejado a Luis Eduardo Cortés de presidente en funciones de la comunidad pero le cesó, al igual que a Luis Peral y a Nacho Echániz, que habían concurrido conmigo en las elecciones --señala Aguirre en dicho libro--. La ley prohibe terminantemente que el presidente de la Comunidad de Madrid tenga ningún otro cargo, pero como él era 'Dios' se mandó hacer un informe ad hoc. Yo tuve una discusión violentísima con Alberto en una cena que dio Gela Alarcó en su casa, nada más separarse de Rodrigo Rato, porque me quería convencer de que estaba sensacional hacer cesado a los tres consejeros y haberse quedado él de presidente, como que era totalmente ilegal".

La presidenta añade que Gallardón los cesó alegando que lo hacía para "que nadie estuviera contaminado en su gobierno de la Comunidad". "Sin duda lo hizo por fastidiarme a mí. No era la primera ni la última faena que me hizo", apostilló.

Y en esa enumeración de "faenas" del alcalde de Madrid, Aguirre subraya el hecho de que conociera de antemano y no se lo comunicara que Tamayo y Sáez iban a dejar a Simancas en la estacada. "La primera (faena), fue cuando nos enteramos de que la noche anterior al 10 de junio, él ya sabía lo que iba a pasar y no nos dijo absolutamente nada. Luego, en la Asamblea, se levantó y se marchó cuando habló Tamayo", afirma Aguirre.

De esta forma, la presidenta de Madrid da por buenas las afirmaciones del periodista Jordi García Candau, quien asegura que Ruiz Gallardón le dijo la noche antes del 'Tamayazo' que iba a ocurrir "algo muy gordo" al día siguiente y que él estaba "totalmente en contra". Gallardón negó después que se refiriera a la polémica ausencia de los dos socialistas en la Cámara.

AGUIRRE HABLA CON RAJOY DE GALLARDÓN

Otro epígrafe de la biografía elaborada por Drake hace referencia al momento en que Aguirre decidió que quería a optar a la presidencia del partido en Madrid, una vez que Pío García Escudero había optado por dejar el cargo.

Tras resumir las cenas, encuentros y cruce de declaraciones que mantuvo entonces con Gallardón --que avaló una candidatura alternativa de su 'número dos', Manuel Cobo--, Aguirre asevera que ella no pidió "permiso" a Rajoy para presentarse durante una reunión que ambos mantuvieron en agosto de 2004.

"Pero yo no pedí permiso a Mariano para presentarme; yo le pedí una entrevista para comunicarle que me iba a presentar, para anunciárselo y decirle que, además, iba a ganar. '¿Tú crees que ganas?', preguntó Rajoy. 'Mariano, yo creo que arraso', respondió Esperanza".

Aguirre hace públicos otros comentarios que, el aquella conversación con Rajoy, hizo sobre el actual alcalde de Madrid: "Le dije que yo sabía que Alberto estaba radicalmente en contra de que yo me presentase, porque consideraba que pierdo votos respecto al partido. Espero que tú no pienses lo mismo de mí que Alberto. 'No me lo perdonaría mi hermana Mercedes, que es una entusiasta tuya', me contestó el presidente entre risas".

"Alberto quiere hacer creer a todo le mundo que él representa al centrismo --dice la presidenta que siguió diciéndole a Rajoy--, y yo lo más rancio y conservador de la derecha. Reconozco que Alberto es cojonudo. Tiene a los medios de comunicación en un puño, vive para esto, es un político de raza, incansable... Pero yo no puedo estar de acuerdo con darles la píldora del día después a las niñas de 12 años, ni con una subida de impuestos... Nuestras diferencias son de concepción política, y yo entiendo que la de Älberto es conservadora. Lo que ocurre es que un día encargó una encuesta que le reveló que los madrileños eran de izquierdas y se convirtió en el progre por antonomasia. Y yo, que siempre he sido liberal, que no me he movido de mi sitio por ser siempre la misma, que he sido muy criticada por ser espontánea, por ser natural, por hacer políticas liberales... parece que molesto".

A continuación, puntualiza que también aprovechó la ocasión para sugerirle al presidente de su partido que incluyera a Gallardón a 'maitines' a modo de compensación. "Haciendo honor a una frase muy tuya, 'la vida es muy dura', y sabiendo que a Alberto no le va a gustar que yo salga elegida presidenta del partido en Madrid, podría llegar a entender que hicieses a Gallardón de maitines en compensación por mi presidencia regional".

AZNAR Y SU DECISIÓN DE HACER A GALLARDÓN ALCALDE

Asimismo, el libro incluye "el secreto de las encuestas Wert", o lo que es lo mismo, la encuesta que se realizó en primavera de 2002 y que, hipotéticamente, llevó al ex presidente José María Aznar a decidir que Gallardón debía ser candidato a la alcaldía de Madrid en 2003 y Aguirre, a la comunidad.

Según la encuesta publicada en esta biografía, sus resultados avisaban de que la intención de voto en la Comunidad era de 52 escaños para el PP (tres menos que en 1999); 42 para el PSOE (tres más que en las anteriores) y 8 nuevamente para IU, por lo que Gallardón quedaba sólo dos escaños por encima de la suma PSM-IU.

Y esa misma encuesta hizo un estudio por candidatos para la alcaldía de la Madrid, resultando que José María Álvarez del Manzano obtenía un 0,5 por ciento menos de votos que en los comicios del 99; Gallardón un 1,4 por ciento más; Mercedes de la Merced un 0,6 por ciento más; Rodrigo Rato un 1,8 por ciento más y, Esperanza Aguirre, un 5,3 por ciento más.

"Se puede concluir, por tanto, que tras los resultados de estas encuestas, la comunidad se podía perder o ganar (en 2003) por la mínima con Alberto Ruiz Gallardón como cabeza de cartel y que, el Ayuntamiento de Madrid, no era tierra conquistada como se pensaba, ni con Alberto, ni con Mercedes ni con Rato, ni mucho menos con Álvarez del Manzano; porque sólo con Esperanza Aguirre el PP conseguía una cómoda mayoría absoluta", concluye Drake, autora de la biografía de Aguirre.