El alcalde de Lleida reconoce que es difícil multar a bancos con pisos vacíos y vuelve a pedir que cedan las viviendas

Actualizado: martes, 4 febrero 2014 11:40

MADRID, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Lleida, Àngel Ros, ha reconocido este martes la dificultad de sancionar a las entidades financieras con pisos vacíos durante una larga duración de tiempo y ha explicado que hay que "hilar muy fino" para poder hacerlo porque existe un vacío legal al respecto. Por ello, ha insistido en pedirles que cedan esas viviendas a la bolsa municipal de pisos y evitar así el conflicto.

Ros ha pronunciado este martes una conferencia en el foro 'Smartcity. Foro de la Nueva Ciudad', donde ha explicado la misiva enviada a las entidades bancarias adjuntando la moción aprobada por el Ayuntamiento de Lleida que contempla la posibilidad de iniciar expedientes sancionadores en caso de que los dueños mantengan los pisos vacíos de manera prolongada sin causa justificada.

Según ha reconocido, esta medida es "de difícil aplicación", pero cuenta con diversos informes a favor que avalan la medida. Sin embargo, ha dejado claro que el objetivo no es sancionar a las entidades bancarias, sino conseguir que pongan sus pisos a disposición de la bolsa municipal social, que cuenta ya con 500 viviendas, 50 de ellas cedidas por los bancos.

Para aprobar esta iniciativa, el PSC descartó otra presentada por CiU como "correa de transmisión" de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). A juicio de Ros, esta moción era "más radical" y por tanto "más difícil de llevar a la práctica. "Debo cumplir la legalidad vigente", ha defendido ante el portavoz de CiU en el Ayuntamiento, Joan Ramón Zaballos, quien ha reconocido que lo importante eran las medidas que se adoptaran después y la voluntad de colaboración alcanzada.

Durante su intervención, Àngel Ros también ha hecho alusión a la reforma de la administración local recientemente aprobada por el Gobierno y se ha erigido como firme defensor de las competencias municipales que la ley otorga a las comunidades. A su juicio, "al final lo obvio se impone" y los ayuntamientos acabarán ejerciéndolas cedidas por las autonomías, lo que además sumará gastos burocráticos.