Dice que, a pesar de los buenos datos de la economía vasca, va a tener dificultades y dice que 2008 es "casi" un "annus horribilis"
BILBAO, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, apeló hoy a la responsabilidad de los partidos políticos vascos, a los que instó a "trabajar duro" para afrontar la actual crisis económica y no pensar "sólo en elecciones". "Tiempo habrá para las promesas", aseguró.
Ibarretxe, que presidió hoy en Bilbao el VI Encuentro Anual de la Cámara de Comercio, así como la entrega de Distinciones Cámara 2008, hizo estas manifestaciones ante un nutrida representación del mundo empresarial y político vasco.
En su intervención, quiso hacer "seriamente" una llamada a la "responsabilidad de todos los partidos" porque no pueden estar preocupados "sólo por las elecciones" en "un momento tan delicado". Ibarretxe indicó que, si se mantiene esa senda, puede hacerse "inmensa" la sima entre la política y la sociedad, lo que puede ser "muy peligroso".
Ibarretxe realizó esta reflexión cuando se refirió al proceso de fusión de las cajas vascas, lamentando que sea "incompleta" y criticó la actitud "irresponsable" de un partido, en referencia al PSE-EE, "obsesionado sólo con el cálculo electoral".
El lehendakari señaló que la sociedad necesita de líderes políticos que "se preocupen más por los problemas y menos por la imagen y las campañas". "Tiempo habrá entonces para las promesas, ahora lo que toca es trabajar y trabajar duro", agregó.
Ibarretxe afirmó que la fusión de las cajas tiene una "enorme trascendencia" y, por ello, dijo no entender a los que hacen política "con minúsculas" con la Caja Vital. Una postura que, a su juicio, entra "en contradicción" con las recomendaciones del Banco de España y de "su propio Gobierno presidido por Zapatero", que "estiman como indispensables las fusiones en España, pero curiosamente corrosivas en Euskadi".
"ANNUS HORRIBILIS"
El lehendakari aseguró que se está viviendo "un momento delicado" y 2008 es "casi un annus horribilis". En esta situación, afirmó que hay que "hablar claro", ser "realista" y "no edulcorar la realidad". No obstante, señaló que también hay que trasladar "un espacio para la esperanza".
Ibarretxe indicó que 2008 es un año "en el que casi cambia el mundo" y destacó que la actual crisis ha precipitado "una dura recesión", cuyas "definitivas consecuencias no alcanzamos todavía a determinar". "Es evidente que tenemos problemas y tendremos más", afirmó el lehendakari, quien añadió, no obstante, que "no se puede seguir alimentando una reacción negativa exagerada, especialmente, en el consumo".
El lehendakari, que recordó el Plan de aceleración económica presentado hace unos meses, señaló que "empieza a ser reconocido desde fuera" que el País Vasco está "mejor preparado" para afrontar la crisis.
Ibarretxe indicó que en el País Vasco se ha trabajado "mucho" y se ha apostado por la economía productiva, lo que ha permitido, a su juicio, que "Euskadi esté mejor preparada que España para afrontar la crisis".
En este sentido, recordó los datos dados a conocer hoy por el Eustat, con un crecimiento intertrimestral del PIB del 0,3 por ciento en el tercer trimestre, "frente al decrecimiento del 0,2 por ciento en España y en Europa".
No obstante, indicó que, a pesar de esos "buenos datos", en Euskadi hay "dificultades y vamos a tener más en el futuro". Sin embargo, se mostró optimista y dijo que no se van a "arrugar ante esta crisis", sino que se "actuará". Además, Ibarretxe apuntó que hay que tener en cuenta que Euskadi "no se enfrenta, en ningún caso, a una situación de paro masivo, como lo que previsiblemente va a volver en España".
El lehendakari señaló que, por razones de relevo generacional, se mantiene una "elevada" necesidad de profesionales en el horizonte 2015, en concreto, 90.000. Ibarretxe afirmó que es un problema para el que se está ultimando "una estrategia de respuesta" en el Foro de Competitividad".
"Esto, sin embargo, no significa que la situación no vaya a ser complicada, porque coexistirán las necesidades de profesionales con la destrucción de empleo, lo que va a suponer una enorme tarea para las políticas activas. Ya estamos preparando iniciativas para responder de forma eficaz a este nuevo problema, aunque no puedo dejar de lamentar que otra crisis nos pille sin resolver el bloqueo institucional del transporte o de las políticas de empleo por falta, sin duda, de voluntad política", señaló.
Ibarretxe manifestó que "ahora menos que nunca es tiempo para la autocomplacencia y la arrogancia". "Lo que ahora importa y concentra nuestros esfuerzos es la crisis y sus consecuencias que van a ser muy duras". El lehendakari apuntó que está afectando a los resultados de las empresas y en la industria el "bache dura ya dos trimestres".
"Si la recesión no se cronifica atendiendo a experiencias del pasado, la idea es que en total puedan afectan a unos cinco trimestres, ésto supondría una salida de la recisión para 2010, que es todavía lo que predice el FMI, pero que depende de cómo se gestione la crisis", añadió.
Ibarretxe, que hizo mención en su discurso a proyectos estratégicos como la Y vasca o la Variante Sur Ferrovaria, señaló que en este año también ha habido elementos positivos como la apuesta por la economía productiva, la citada fusión de las cajas, la sentencia del Tribunal de Luxemburgo sobre el Concierto y la estrategia a favor de la innovación.
En relación a esta cuestión, indicó que la transferencia de I+D+i debe suponer un "nuevo compromiso" el de que los fondos que se deriven de la transferencia irán directamente a financiar los fondos para la innovación en Euskadi.
El lehendakari señaló que el panorama del 2009 es "tan complicado" que "todo lo que sea crecimiento positivo será un buen dato". En esta coyuntura, cree necesario arbitrar "respuestas coordinadas" para que "no nos sobrepasen los problemas" y también respuestas "globales" pero teniendo en cuenta que "nuestras decisiones aquí son determinantes para nuestro futuro".
"La clave está en lo que hacemos aquí no sólo lo que se decida en el G-20, con esto no quiero decir que la regulación mundial y el papel de la supervisión del FMI no sean importantes, son simplemente una condición necesaria para que no ocurra otra ven una crisis como ésta", añadió.
El lehendakari afirmó que, para que esta recesión no se convierta "en depresión", es clave la política de estabilización. En este sentido, reclamó una política monetaria "mucho más agresiva" por parte del BCE, que "ha actuado tarde y va a paso de tortuga", así como una política fiscal "decidida" como la planteada "por el Gobierno vasco y las Diputaciones".
El lehendakari aseguró que la actual crisis es "una crisis de soberbia". "Qué grado de soberbia la de aquellas instituciones financieras que tanto despreciaron al poder político, al control en definitiva del poder que emana del pueblo y de sus ciudadanos, para, al final, acudir a él a pedir auxilio de miles de millones de dólares", señaló.
Ibarretxe denunció que los "ultraliberales profundos" pasaron de esa "soberbia al pánico" y, a partir de ese momento, a reclamar el dinero de "todos aquellos ciudadanos a los que degradaron a la condición de meros consumidores, a los que en las últimas décadas han ignorado, prestando oídos sólo a la voz del mercado".
Asimismo, denunció que EE.UU. se muestra "incapaz de controlar la fiera financiera que él mismo se ha contribuido a crear" y, por otra parte, la UE ha dado otro ejemplo de "incapacidad" para dar "a tiempo una respuesta unitaria a la crisis". A sus críticas, unió las dirigidas al presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, "por negar y luego, tratar de ocultar" la crisis.
