El PP le pide que "lidere" el proceso de descolonización del Sáhara
MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Trinidad Jiménez, se ha negado una vez más a condenar la actuación de las fuerzas marroquíes en el desmantelamiento del campamento de protesta saharaui de Gdaim Izik hasta no disponer de "datos confirmados" sobre los sucesos, porque lo contrario sería "especular".
En la sesión de control al Gobierno en el Senado, Jiménez ha respondido a preguntas de representantes del PP, PNV, IU y el Grupo Mixto sobre los hechos ocurridos la semana pasada en las proximidades de El Aaiún que han dejado un número indeterminado de muertos (10 policías marroquíes y dos civiles saharauis, según Rabat, y 36 fallecidos según testigos citados por el Frente Polisario).
En opinión de Jiménez, el Gobierno español no puede, como tampoco han hecho otros Ejecutivos, instituciones u organismos internacionales, ir más allá de expresar su "profunda preocupación" por los sucesos, reclamar que se deje trabajar a los medios de comunicación internacionales, pedir respeto a los derechos fundamentales y exigir una investigación de lo ocurrido porque "los hechos tienen consecuencias pero los pronunciamientos sin datos también los tienen".
Ha confiado en que "en los próximos días" se informe del número real de víctimas que provocaron los sucesos mencionados porque las cifras que circulan en la actualidad España no las considera "fehacientes".
ESPAÑA NO ES PARTE EN LAS NEGOCIACIONES
La ministra ha reconocido que España tiene una "responsabilidad histórica" con el Sáhara, pero ha precisado que Naciones Unidas no considera a este país, que dejó de ser potencia administradora en 1976, como una parte en las negociaciones que auspicia entre Marruecos y el Frente Polisario, que cuentan en cambio con la participación de Argelia y Mauritania.
Ha subrayado que el Gobierno español defiende el diálogo entre las partes como "único cauce" para encontrar una "solución política justa, duradera y mutuamente aceptable que prevea la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental en el marco de disposiciones conformes a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas", que es la postura, ha dicho, que respalda la ONU de forma "invariable" desde 2002 y a la que España se adhiere "milimétricamente".
Ha defendido asimismo el mantenimiento de la interlocución con Marruecos si España quiere ser "útil" como "facilitadora" en la resolución del contencioso histórico.
VÍCTIMAS EN AMBOS LADOS
Y se ha comprometido a que cuando se prueben los hechos que acontecieron la semana pasada, el Ejecutivo español actuará "en consecuencia". A pesar de que afirmó minutos antes no disponer de datos confirmados sobre el número de víctimas, dio por hecho que ha habido víctimas "en ambos lados".
El senador del PP Alejandro Muñoz Alonso le ha pedido a España que "lidere" el proceso de descolonización del Sáhara porque, en su opinión, España no podía renunciar a la soberanía del territorio, por lo que técnicamente ésta sigue estando en la antigua potencia administradora.
Ha acusado al Gobierno de "olvidarse" de los derechos humanos en el Sáhara porque considera las relaciones con Marruecos más importantes y ha afirmado que supone una contradicción defender la libre determinación del pueblo saharaui y al mismo tiempo una solución negociada con Marruecos.
EL PUEBLO SAHARAUI, EN PELIGRO DE EXTINCIÓN
En opinión del senador 'popular', el pueblo saharaui "está en peligro de extinción" después de que el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, "tirara la toalla" en 2006 con respecto a la búsqueda de una solución al contencioso.
La ministra le recordó que el presidente del PP, Mariano Rajoy, afirmó en 2003, cuando era vicepresidente del Ejecutivo, que "sólo con consenso entre las partes era posible alcanzar una solución" al contencioso del Sáhara y puso en valor que España es el primer donante en ayuda al desarrollo del pueblo saharaui, con 21 millones de euros desembolsados en 09, lo que multiplica por cuatro la cifra que los 'populares' dedicaron a este pueblo en 2003.
El senador del Grupo Mixto José María Tuñón advirtió por su parte de que una posición de "debilidad" por parte de España sólo "va a contribuir a exacerbar" las posturas de Rabat, mientras que la representante del PNV Miren Lore Leanizbarrutia acusó al Gobierno de no dar muestras de que defiende los intereses del pueblo saharaui.
Por parte de IU, el senador de IU Joan Josep Nuet reclamó al Gobierno que "proteja" a la prensa "libre y española" y le pidió que no practique "la táctica de escapismo" con los saharauis.
