Propondrá la inclusión, en el preámbulo de la Constitución, de un reconocimiento a las víctimas del terrorismo
BILBAO, 21 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy en el municipio vizcaíno de Barakaldo que el próximo mes comunicará a los partidos el inicio del diálogo con ETA para poner fin a la violencia. Además, aseguró que propondrá a las formaciones políticas la inclusión, en el preámbulo de la Constitución, de un reconocimiento a las víctimas del terrorismo.
Al inicio de su intervención ante los miles de afiliados socialistas desplazados hasta la localidad fabril para participar en la tradicional Fiesta de la Rosa, Rodríguez Zapatero recordó que antes de que se declarara el alto el fuego, por parte de ETA, hace dos meses, él ya había transmitido a la sociedad espoñola "y especialmente a la sociedad vasca" la posibilidad de que se materializara "el principio del fin". "Mucha gente --dijo-- decía que eran quimeras, buenos deseos, y llegó el alto el fuego de ETA".
Ante las "dudas, temores e incertidumbres" de algunos, insistió hoy en "el empeño y la determinación absoluta del Gobierno para ver el fin de la violencia en Euskadi y en toda España".
También rememoró sus palabras, tras el alto el fuego permanente, de tomarse "un tiempo" para evaluar "el alcance, la voluntad y las posibilidades de alcanzar el fin de la violencia". "Hoy quiero decir que tal y como anuncié, el próximo mes comunicaré a las fuerzas políticas el inicio del proceso del diálogo para ver el fin de la violencia con la banda ETA", manifestó.
Aunque admitió la posibilidad de que existan "dudas razonables" sobre el objetivo, señaló que el Ejecutivo se marcará el objetivo de la paz" por razones de pasado, pero, ante todo, por razones de futuro", para que Euskadi viva "en paz y en libertad".
VICTIMAS EN LA CONSTITUCION
El presidente del Ejecutivo aludió a las víctimas del terrorismo, con las que la democracia "tiene un deber" y adelantó su intención de promover incluir un recuerdo a las mismas en el preámbulo de la Carta Magna. "Es mi propósito proponer el reconocimiento del dolor de las víctimas en el mejor homenaje que podemos hacer, recordarlas en el libro de la convivencia, la memoria de las víctimas en la Constitución, y así lo propondré al resto de las fuerzas políticas", aseguró.
Aludió a la necesidad de dar "pasos firmes", aunque "sin prisas y sin ansiedad", porque, después de 30 años de violencia, "el Gobierno se tomará el tiempo necesario para que cada paso que dé sea un paso irreversible en la buena dirección, en la que quieren los ciudadanos y que asegure que nunca más se volverá a ver la violencia". "Y si aquellos que han abrazado, defendido, apoyado la violencia dan un paso, la democracia sabrá dar sus pasos", agregó.
El máximo líder del PSOE aseguró que todas las ideas y sensibilidades políticas se podrán "defender, expresar y mantener" siempre que se aborden "con la palabra y el respeto democrático".
También quiso dejar claro que "la paz no tiene precio político" porque "no es el fin de la política", sino "más bien la mejor condición para la política de verdad".
PAZ, LEGALIDAD Y CONVIVENCIA
El nuevo tiempo para Euskadi deberá basarse, según Zapatero, en "tres principios irrenunciables", "la paz, la legalidad y la convivencia". Precisamente, destacó la convivencia como "una gran tarea colectiva" pendiente que requerirá de "generosidad y capacidad de reconciliación". "Nosotros estamos dispuestos a la convivencia, a recuperar el mayor clima de respeto pese a haber sufrido tanto y no haber hecho daño a nadie", indicó.
Aseguró que "tendremos diálogo político" con todos los que deseen "dialogar en términos políticos", de forma que el diálogo conduzca a "renovar un gran acuerdo de convivencia, un acuerdo de convivencia fruto del reconocimiento a lo que es Euskadi y a su pluralidad, del acuerdo y del pacto".
El presidente animó a "compartir las identidades" y lograr "un gran acuerdo de convivencia entre todas las fuerzas políticas y los ciudadanos de Euskadi". A su juicio, el futuro de Euskadi dependerá de "la voluntad y capacidad que los vascos de buena fe pondrán para decir 'queremos convivir y no excluir'".
También consideró importante que el País Vasco piense "tanto en su futuro como en su pasado" y aseguró que "por razones de historia y de porvenir", Euskadi tiene "su mejor sitio" en "la España Consitucional, democrática, avanzada y libre que reconoce todas las identidades, todos los pueblos y que deja decidir a todos los ciudadanos".
Admitió que los ciudadanos vascos "decidirán su futuro", pero advirtió de que, "como ocurre en democracia", lo harán "dentro de las leyes y respetando cada uno de los principios del ordenamiento".
Rodríguez Zapatero garantizó que los socialistas trabajarán "para ese gran acuerdo" que permita "tener el tiempo de Euskadi más brillante de su historia". "Algunos puede que tengan prisa, otros quizás piensan que esto no debería haber arrancado, pero la paciencia democrática unida a la valentía es lo que cambia las cosas y lo que tenemos por delante no puede ser fruto de ningún laboratorio científico, sino fruto de la política", agregó.
Tras reconocer que hay muchos responsables políticos que "también trabajan por la paz", afirmó que el PSOE desea que "la paz sea de todos y para todos de una vez en Euskadi". En su opinión, tanto la paz como la convivencia deben ser "esfuerzos compartidos" en los que nadie debe querer ir "una cabeza por delante" y en los que "todos deben aportar".
Aseguró que la oportunidad de la paz, en la que él ha puesto todos sus "desvelos" deberá ser gestionada "más allá de un Gobierno y una legislatura" y, al menos se prolongará durante "tres o cuatro años", por lo que según él es necesario "el concurso de todos". "Hoy --continuó-- empeño mi palabra de que, por parte del Gobierno y el Partido Socialista vamos a asumir toda la responsabilidad y a saber compartirla, y reconocerla a todos los que, de buena fe, quieren que este proceso termine con la paz y un nuevo tiempo para Euskadi".
El presidente destacó la labor del PSOE, que "ha sido capaz de hacer cambios y reformas" antes "impensables en España", y de aprobar leyes, en materia de política social como la Ley de Dependencia o la de la Igualdad.
Rodríguez Zapatero dijo haber trabajado "cada día" para poder "dar y contribuir" a "devolver" la paz en Euskadi. "Hay sitio para todos en esta Euskadi, posibilidades de hacer políticas para todos si respetan a todos, de propuestas de reformas, de cambios si se respetan las leyes y la democracia. Es el futuro que tenemos por delante", garantizó.
Rodríguez Zapatero desarrolló su intervención en el BEC, ante un aforo de unas 10.000 personas, congregadas para celebrar el Día de la Rosa. Al acto acudió el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, además de representantes del PSE-EE; el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias; la secretaria general del PSOE en Cantabria, Dolores Gorostiaga; la presidenta del Parlamento de Galicia, Dolores Villarino; el secretario general del PSN, Carlos Chivite; y el secretario del PSOE de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONGs, Pedro Zerolo.
Durante el acto, los dirigentes socialistas tuvieron palabras de recuerdo para las víctimas del partido asesinadas por ETA, así como otras de reconocimiento a dirigentes como Jesús Egiguren, del que, dijeron, "prometió algo, y lo ha cumplido".
