(Ampl.) Bono dice que no le gustó el insulto a Rajoy, pero que no es igual que la "mentira" de Aznar sobre Zapatero

Actualizado: viernes, 29 febrero 2008 11:45

Está convencido de que el PSOE ganará las elecciones, porque "en esta época gana la gente buena"

MADRID, 29 Feb. (EUROPA PRESS) -

El cabeza de lista de los socialistas al Congreso por Toledo, José Bono, reconoció hoy que no le "gusta" que el ex presidente del Gobierno Felipe González haya llamado "imbécil" en un mitin al presidente del PP, Mariano Rajoy, pero defendió que "no es lo mismo" que la "mentira burda" que el ex presidente José María Aznar dijo "con odio" sobre el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, al asegurar que sigue negociando con ETA.

El ex ministro de Defensa afirmó, en declaraciones a Telecinco recogidas por Europa Press, que está "seguro" de que Felipe González "está arrepentido de que se le haya escapado" esa palabra, pero recalcó que el hecho de "que salga una palabra que no debió haber salido", y que cuenta con "elementos para quitarle importancia", no es equiparable "a que se haga un argumento infamante y lleno de deshonor".

"En el caso de Aznar es increíble", subrayó Bono, que se preguntó "cómo se le puede ocurrir decir (eso) a una persona que ha sido presidente del Gobierno". "No puede perder la sensatez de esa manera, y además mintiendo", insistió.

Bono señaló que Aznar habló en el mitin "con odio", además de "con falsedad", de Zapatero y que con estas palabras "se desmerece mucho". Por eso, le recordó que las elecciones "van a pasar y el 10 de marzo" debería "avergonzarse de decir falsedades y mentiras". A juicio del ex ministro, el problema es que el PP "en toda la legislatura no ha aceptado el resultado del 14 de marzo". "Perdieron las elecciones y están enojados porque creían que tendrían que haberlas ganado", afirmó Bono. Además, dijo, han "considerado a los socialistas unos usurpadores del poder, una especie de realquilados con derecho a cocina".

Por todo esto, el candidato socialista defendió que el PP "debe perder" y, además, "por algo más" de lo que apuntan algunas encuestas, ya que si no pueden "creerse que, si pierden por poco, la bronca que han organizado en toda esta legislatura ha sido insuficiente y monten más bronca"

"IMAGEN BONDADOSA" DE ZAPATERO.

No obstante, aseguró estar convencido de que el PSOE va a ganar y apuntó que "la decisión ya esta tomada" y que no quedan muchos votantes indecisos. Si los hubiera, agregó, "lo que más ha de decidirles está en los candidatos" y en la confianza que les ofrezca.

En este sentido, defendió que el presidente del Gobierno está ofreciendo una "imagen bondadosa", algo que es positivo ya que "el colmillo retorcido, la mala cara y la mala cara tienen que pagar peaje". "Por eso, yo creo que lo que no está decidido se decidirá en favor de la gente más bondadosa y en contra de la gente más bronquista", recalcó, para después subrayar que "en esta época gana la gente buena".

"Aquí hace falta, además de ideas, tener también buen corazón y buena lengua", afirmó, tras definir al presidente del PP, Mariano Rajoy, como "un registrador de la propiedad muy deslenguado".

En este punto, criticó que "el mismo que era vicepresidente cuando enterraron a los muertos" del accidente del Yakolev "con deshonra y falsedad" sea el que acuse al presidente del Gobierno de haber agredido a las víctimas. "Con ese lenguaje no se puede ir", insistió.

"DEJAR FUERA A LOS QUE INSULTEN".

Aunque Bono no quiso hablar de posibles pactos o coaliciones después del 9 de marzo, reconoció que hay asuntos en los que es necesario que el PSOE y el PP lleguen a acuerdos, porque así lo "quieren" sus votantes.

No obstante, precisó que, para ello, habría que "dejar fuera a los diputados y los dirigentes que se insultan y llaman a una diputada tísica o aquellos que creen que en el conflicto máximo o en el insulto máximo está su éxito". "En el PP tienen que producirse cambios para que se pueda dar acercamiento, incluso puntual, en algunos temas", recalcó.

Mientras, preguntado por futuros acuerdos con nacionalistas, Bono defendió que lo importante ahora para el PSOE es "pedir a los españoles una mayoría suficiente" para gobernar, pero apuntó que, si fuera necesario pactar con nacionalistas sería de forma que "no se modifique lo que resulta esencial del programa" socialista. "Yo con los separatistas no quiero saber nada de nada", agregó.

Asimismo, respecto al rechazo de algunos partidos nacionalistas a que pueda convertirse en el próximo presidente del Congreso, subrayó que quienes ganen las elecciones serán quienes "gobernarán las instituciones", porque de otra manera, agregó, "sería el mundo al revés".