(Ampl.)Trabajadores de RTVE presentan un plan de saneamiento alternativo que incluye formas de contratación temporal

Actualizado: martes, 4 abril 2006 22:32

MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Comité General Intercentros (CGI) de Radiotelevisión Española (RTVE) presentó hoy una propuesta alternativa de plan de saneamiento del ente público en la que pide eliminar las limitaciones de la futura Corporación para acudir a la contratación temporal. Estas limitaciones, a juicio del CGI, son "contraproducentes porque provocan la externalización de producción de contenidos".

Además, el máximo órgano de representación de trabajadores presentó un documento crítico con la propuesta de SEPI y la Dirección General de RTVE, en el que denuncia las "contradicciones" de las medidas planteadas, "como la de criticar un punto de partida de bajas audiencias y proponer la reducción del entretenimiento en 'prime time', donde la producción es más característica y rentable", denuncian.

En el documento, facilitado a Europa Press, se engloban las medidas del plan de saneamiento en tres bloques: las de programación, "que en nada corresponden al plan de saneamiento", las de adecuación organizativa, "que bien se podrían haber tomado en años anteriores de gestión", y las "traumáticas de reducción de servicio público, que no se justifican".

Entre las "contradicciones", el CGI destaca algunos planteamientos que toma el plan como puntos de partida, entre ellos, el "importante déficit de explotación anual", que para el CGI es "lo que ocurre en todas las radiotelevisiones públicas del mundo", así como "el enorme endeudamiento" de la casa que, aseguran, "no ha sido un recurso de RTVE sino del estado para esconder su déficit".

También critica medidas para corregir ineficiencias como "ciertos derechos deportivos de costes elevados", materia en la que el texto del CGI ironiza: "Si se trata del deporte de masas, no creemos que las cadenas que nos arrebatan los derechos del Mundial de fútbol, de la Champions o de la Fórmula 1, lo hagan por filantropía. Será porque los ingresos directos, indirectos y diferidos merecen la pena".

En cuanto a la organización, consideran una "irracionalidad" separar los medios dedicados a informativos diarios de los no diarios, como según aseguran, pide el plan, lo que abundaría en la situación de "infrautilización de recursos que el plan dice combatir".

En este capítulo, los trabajadores critican el diagnóstico que la SEPI y la Dirección General hacen de la situación de informativos, de la que se dice que "al estar los medios de producción dentro del área de programación, se tiende a utilizar un número de recursos de producción superior al óptimo para asegurar la ocupación del personal". Para el CGI, el plan "aprovecha para hacer una acusación impúdica de que sobran trabajadores". "Si se nos entretiene para no estar ociosos, ¿entonces por qué se sigue contratando gente y productoras?", se preguntan.

El CGI también se opone a que el plan de saneamiento determine el número de contenidos que tiene que ofrecer la futura Corporación --lo que el proyecto de ley atribuye a los mandatos marco--, y que, por ejemplo en el caso de contenidos de entretenimiento, está establecido en el 11 por ciento.

"UN REFRITO DE LA REFORMA PORTUGUESA"

La conclusión del CGI es que el plan de saneamiento "es un refrito sin sentido" de la reforma de la radiotelevisión portuguesa. "El estudio técnico realizado, lo ha sido por una empresa que hace poco iniciaba su experiencia en este terreno viniendo a solicitar información a RTVE para acometer la reducción de la radiotelevisión portuguesa. Ahora parece que están calcando lo allí planteado", afirman.

El plan alternativo dedica un capítulo al empleo, en el que se reclama la actual dimensión "como mínimo nivel de empleo global", tras la reducción del 25 por ciento de su dimensión entre 1989 (12.4741 empleados) y 2000 (con 9.500). La mayor preocupación del CGI es la externalización de la producción, actividad que es en realidad hay que "sanear", y que tildan de "privatización progresiva y encubierta".

En esta materia, proponen una reordenación territorial del empleo y la liberalización de la política de contratación, de forma que TVE pueda acudir a la contratación temporal" para evitar la externalización de la producción. Entre otras reformas, piden mayor transparencia para el banco de datos de contratación, "que no tiene control alguno y propicia el amiguismo".

"Además, denuncian que se aplica la fórmula de realizar contrataciones en fraude de ley utilizando la intermediación de empresas de servicios. En ese proceso caben, y se han propiciado, las numerosas corruptelas de amigos y familiares", aseguran.

Entre otras medidas, el CGI dedica epígrafes a corregir situaciones como la "marginación tecnológica" de RTVE, la actitud "cicatera" en la adquisición de derechos de retransmisión, el fortalecimiento del archivo y la documentación, y mantener la estructura territorial, "como seña de identidad de RTVE".