MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado a 35 años y 7 meses de prisión y a multa de 91.354 euros al ex dirigente etarra Juan Carlos Iglesias Chouzas, "Gadafi", por el intento de secuestro en mayo de 1992 de un empresario en la localidad vizcaína de Getxo.
El tribunal impone a "Gadafi" esta condena por los delitos de construcción de lugares con propósito de encerrar a otro, utilización de vehículo de motor, allanamiento de morada, falsificación de documento de identidad, tenencia de armas y de explosivos y depósito de armas. En cambio, le absuelve del delito de detención ilegal en grado de tentativa del que también le acusaba el fiscal, que pidió en el juicio 42 años de prisión para el histórico etarra.
La sentencia considera probado que los miembros del "Comando Vizcaya", integrado por Juan Manuel Ormazabal, "Turko", y Javier Martínez Izaguirre, planearon en 1991 buscar algún lugar para mantener encerrado a alguna víctima y que les sirviese para ocultar armas, explosivos y documentación.
Para ello, Iglesias Chouzas y Martínez Izaguirre entregaron al también miembro de ETA Manuel Fernández Pérez 48.000 euros para comprar una vivienda en la localidad vizcaína de Barrica, con el fin de construir en su garaje un zulo. Una vez terminado, trasladaron armas, explosivos y demás armamento que disponía el "comando".
SECUESTRO DE UN EMPRESARIO
Los etarras decidieron secuestrar el 12 de mayo de 1992 al ex consejero del BBV Guillermo Barandiaran Alday. Para ello, los terroristas se dirigieron a Getxo (Vizcaya) para retener al chófer del ex consejero, quien les conduciría hasta la vivienda del empresario. Sin embargo, el conductor no apareció y no pudieron llevar a cabo el secuestro.
Tras abandonar el lugar, los etarras se dirigieron a la localidad vizcaína de Sopelana, donde al darse cuenta de que había controles policiales se dieron a la fuga en un vehículo robado. Se desplazaron a una casa de Barrica, ante cuyos propietarios se identificaron como miembros de ETA. Entraron en la vivienda y les manifestaron su intención de pasar la noche en la misma, aunque desistieron de ello al descubrir que la Ertzaintza les había localizado.
En el registro practicado el 15 de mayo en la vivienda de Barrica, la Ertzaintza halló un zulo al que se accedía a través de un hueco de 60 por 60 centímetros. En su interior, se localizó una caja con material para la confección de explosivos, un manuel para abrir automóviles, dos bolsas con dos kilogramos de explosivos amosal y un cartucho de goma 2, 40 metros de cordón detonante, varios detonadores y una máquina troqueladora.
PRUEBAS CONTRA GADAFI
El tribunal justifica la condena impuesta a Iglesias Chouzas en las declaraciones policiales de Martínez Izaguirre, en las que reconoció y detalló la participación de "Gadafi" en el intento de secuestro. Durante el juicio, el etarra insistió en que "nunca" tuvieron la intención de secuestrar a "nadie", pese a que sí reconoció la construcción de un zulo en el garaje de la vivienda de Fernández Pérez.
También se basa en la testifical de la persona a quien en su huida Martínez Izaguirre y "Gadafi" robaron un coche en Sopelana para escaparse de la persecución policial. Este hombre ratificó en la vista oral que había oído disparos.
Alude también al testimonio del policía que inspeccionó el vehículo de "Gadafi" abandonado en Sopelana, en el que se localizó documentación falsa, así como el de los policías que practicaron el registro del zulo.
