PALMA DE MALLORCA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Grupo Parlamentario del PSIB-PSOE, Francina Armengol, celebró hoy que el ex alcalde de Andratx, Eugenio Hidalgo, y el ex celador de obras municipal, Jaume Gibert, no pasen las Navidades en la cárcel, después de que el magistrado instructor del caso, Álvaro Latorre, dictara hoy libertad provisional bajo fianza para ambos.
En los pasillos del Parlament, la portavoz socialista consideró que el dictamen del juez entra dentro de la normalidad judicial y no resta "gravedad" a las acusaciones que pesan sobre Hidalgo y Gibert, sino que, a su juicio, supone "simplemente la eliminación de la prisión preventiva porque el juez ha considerado que no existe riesgo de que los imputados puedan destrozar pruebas".
El ex alcalde y el ex celador de Obras abandonaron a las 16:30 horas la prisión provincial de Palma, tras el auto dictado esta mañana por el magistrado que instruye la operación 'Voramar', quien aceptó los recursos presentados por la defensa de ambos acusados y concedió la libertad con cargos a Hidalgo y Gibert previo pago de una fianza de 100.000 y 60.000 euros respectivamente.
Hidalgo y Gibert salieron al mismo tiempo de la prisión con aspecto saludable, acompañados por el letrado Rafael Perera y declinaron hacer cualquier tipo de declaración, aunque Hidalgo deseó unas "felices fiestas" a las personas congregadas en el lugar. El ex primer edil y su abogado abandonaron el recinto en un coche, mientras que Gibert lo hizo en otro distinto.
Asimismo, el auto dictado hoy por el magistrado que instruye el caso obliga a Hidalgo y a Gibert a entregar su pasaporte en el juzgado en el menor tiempo posible e impide que ambos abandonen la isla de Mallorca sin autorización judicial previa, teniendo que presentarse semanalmente en el Juzgado de Guardia.
El ex alcalde de Andratx y el ex celador de Obras permanecían en prisión provisional sin posibilidad de fianza desde el pasado 30 de noviembre, fecha en la que el juez Latorre decretó su ingreso en la penitenciaría tras escuchar su declaración y ante el riesgo de que pudieran destruir o dañar pruebas, alterando las labores de investigación del juzgado.
