MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de derecho y ponente constitucional Gregorio Peces-Barba afirmó hoy que el Tribunal Supremo ha respetado las garantías y ha aplicado los "criterios de la civilización occidental en materia de derechos humanos" al ilegalizar al partido político Acción Nacionalista Vasca (ANV), que tiene 437 concejales en 121 ayuntamientos de Navarra y el País Vasco.
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press el también ex rector de la Universidad Carlos III de Madrid explicó que existen una serie de razones que justifican la "limitación" del derecho a la libertad de expresión y de asociación, recogidas por la Ley de Partidos y que han permitido la ilegalización de ANV.
Así, aclaró que "los derechos nunca son ilimitados" y que el Tribunal Supremo ha basado su decisión en la mencionada Ley de Partidos, aplicando una "doctrina muy clara de límites de derechos", con una "base intelectual muy sólida".
Peces-Barba también explicó que ahora el Gobierno deberá estudiar si disuelve los ayuntamientos en los que gobierna ANV, lo que constituiría ya una "decisión "política", a partir del estudio del Abogado General del Estado, al que calificó de persona "extraordinariamente lúcida y competente". Mientras tanto, afirmó que los miembros de este partido "podrán seguir funcionando como no inscritos o actuar individualmente", sin "ninguno de los derechos o privilegios que tenían como grupo vinculado a un partido político" y sin su "patrimonio", que los poderes públicos podrán "vender o utilizar".
Preguntado por la posibilidad de que la decisión Tribunal Supremo otorgue argumentos dialécticos a quienes defienden la violencia, el catedrático recalcó que ellos "no necesitan muchos argumentos", ya que "los tienen todos", y que se trata de una afirmación "muy falaz". En esta línea, remachó que "más vale atajar" que "utilicen la violencia impunemente". Así, afirmó que "se puede defender el independentismo sin vincularse a la violencia", aunque éste se halle en "la raíz contraria a los valores generales de nuestra cultura política y jurídica" y sin querer "acabar" con el "pluralismo en nuestra sociedad".
