MADRID, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PP en la Comisión de Exteriores del Congreso, Gustavo de Arístegui, propondrá a la dirección de su grupo parlamentario pedir la comparecencia del ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, antes de final del verano para que explique el "gravísimo error" que, a su juicio, ha cometido al darle "estatus de interlocutor" al grupo político y miliciano libanés de Hezbolá.
Aunque De Arístegui admitió que Hezbolá no figura en la lista de organizaciones terroristas de la UE (sí en la de Estados Unidos), señaló en declaraciones a Europa Press que se trata de un "actor profundamente cuestionado" que ha estado "implicado directamente en atentados terroristas muy graves".
Para el diputado 'popular', la entrevista que mantuvo ayer en Beirut Moratinos con el número dos de Hezbolá, Naim Qassem, perjudica el "prestigio y el peso de la UE en la región" y recordó que Qassem constituye el "máximo exponente de la defensa del terrorismo como arma política legítima".
"Mientras Hezbolá no cumpla las resoluciones de la ONU que hacen directa referencia a ella, mientras siga subordinada a países (en alusión a Siria e Irán) que no respetan la soberanía, independencia y la integridad de su propio país (Líbano), no se aclare su participación en gravísimos atentados terroristas y no renuncie a la violencia, ningún interlocutor, y mucho menos el ministro de Exteriores de un país como España, tiene que reunirse con quien abierta, pública y reiteradamente ha defendido el terrorismo como un método legítimo", zanjó.
No obstante, De Arístegui señaló que al menos esperaba que Moratinos hubiera "presionado" a Qassem durante su entrevista para que Hezbolá "renuncie al terrorismo y cumpla con la legalidad internacional".
Con respecto a las entrevistas que Moratinos mantuvo hoy con las autoridades sirias en Damasco, última escala de su gira por la región, que le ha llevado también a Egipto y Arabia Saudí, De Arístegui consideró que a Siria se le debe trasladar el mensaje de que tiene que "cooperar en la investigación de los gravísimos asesinatos políticos acaecidos en el Líbano desde febrero de 2005" y "reconocer la independencia y soberanía de su vecino".
