Arzalluz cree que el Gobierno del PSOE quiere "liquidar a Ibarretxe como ha hecho con Maragall"


BARCELONA, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente del PNV Xabier Arzalluz acusó hoy al Gobierno del PSOE de haberse propuesto "liquidar" al lehendakari vasco, Juan José Ibarretxe, "en un máximo de dos años", de la misma forma que "ha hecho ya con Pasqual Maragall". En esta línea, vinculó al Gobierno socialista con el proceso judicial abierto por el juez Fernando Grande-Marlaska contra dirigentes del PNV asegurando que "si al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, no le hubiera interesado, la Fiscalía no habría pedido medidas cautelares" contra Gorka Agirre.

En una entrevista al diario 'Avui' recogida por Europa Press, Arzalluz se mostró convencido de que el PSOE tiene la "voluntad" de "hacer una coalición con el PNV" en el País Vasco, "como quieren hacer con CiU en Catalunya", un fin para el que le "molesta" el actual líder del PNV y otros dirigentes que no estarían dispuestos a ello, como Gorka Agirre o el mismo Arzalluz.

"Hay miembros de la ejecutiva peneuvista que están dispuestos a pactar con los socialistas en Euskadi, pero ¿quién no acepta esto?, ¿quién da apoyo incondicional a Ibarretxe?, ¿quién molesta?. Pues Egibar, Gorka Agirre, yo... La cuestión es, desde la mentira, mezclarnos con Batasuna. Hacer creer que Egibar pertenece a la izquierda abertzale", afirmó.

Arzalluz negó tajantemente que Gorka Agirre haya hecho "nunca de mediador en el cobro del impuesto revolucionario de ETA" y llamó a "mirar a quien aprovecha" la acusación y el proceso judicial en este sentido abierto por el juez de la Audiencia Nacional Grande-Marlaska.

"Podría parecer que esta historia surge para que hablemos de magistrados afines al PP, pero quien pide medidas cautelares contra Agirre es el fiscal", señaló, para apuntar seguidamente que eso no se hubiera producido "si no le hubiera interesado" a Rubalcaba, del que dijo que "llevaba días filtrando información tranquilizadora y contradictoria al PNV".

El ex presidente del PNV consideró también "impresentable" el proceso judicial abierto contra Ibarretxe por su reunión con el líder de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, y preguntó "qué hará la justicia" contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ahora que "ha anunciado en público que negociará con ETA".

DESCONFIADO DE LAS PROMESAS DE ZAPATERO

Respecto a este anuncio de Zapatero y su compromiso de acatar lo que decida la sociedad vasca, Arzalluz se mostró receloso y consideró que la directiva de Batasuna se mostró "excesivamente alegre" por las palabras del presidente del Gobierno.

"Esto les digo yo a los dirigentes de Batasuna, que desde España respetarán lo que decida la ciudadanía vasca dentro de un orden y sin perjuicio de la unidad constitucional y todo lo demás". "¿La capacidad de decidir nuestro futuro, dónde queda?", apostilló.

Arzalluz se mostró desconfiado con las promesas de Zapatero, del que dijo que "siempre sonríe" y "nunca dice que no" pero "después va a lo suyo", y señaló como ejemplo el caso del Estatut catalán.

Para Arzalluz, "la reforma estatutaria catalana es una chapuza sin nombre". "Después de pactar quién sabe qué con Artur Mas, el PSOE acaba desbancando a ERC, el partido que inició el proceso de reformas y que condujo a un socialista a la presidencia de la Generalitat. Y viene Alfonso Guerra a Euskadi para vanagloriarse de que se cepillaron el texto. Y finalmente arrinconan también a Maragall", añadió.

"ESTOY CON CAROD-ROVIRA"

Arzalluz aseguró "estar con Carod-Rovira" en contra del nuevo Estatut de Catalunya y explicó que "hubiera asistido con gusto" al acto de la campaña de ERC por el 'no' en el referéndum al que fue invitado, pero no lo hizo acatando la "decisión de la ejecutiva del PNV", que pidió a sus dirigentes que no se posicionaran "ni a favor ni en contra del nuevo texto estatutario".

"Yo no acepté la invitación de ERC por no contravenir a la ejecutiva de mi partido, pero algún dirigente peneuvista sí lo hizo" asistiendo a un acto de la campaña de CiU a favor del Estatut, relató.

Arzalluz remarcó que el conflicto vasco no se resuelve con una reforma del Estatuto vigente, que "no tendría ningún sentido" porque el Gobierno central "no ha cumplido tampoco" el vigente, y consideró que pasa, en cambio, por "reconocer Euskadi como pueblo con capacidad de decidir su futuro".

Para el dirigente del PNV, ésa es la "única solución" posible al conflicto y "si no hay este reconocimiento sólo nos queda la resistencia". "No hablo de tiros, ni siquiera de salir a la calle, simplemente que tengan muy claro que este pueblo ya no está dispuesto a negociar nada sustancial con el Estado mientras éste no nos acepte como tal, como pueblo", añadió.

"¡Y A ESTO LO LLAMAN PATRIA!"

Arzalluz aseguró que en Euskadi "no sólo es ETA" la que "piensa en la autodeterminación" sino que "muchos estamos pensando en ello", pero "para autodeterminarnos primero han de reconocernos que somos un pueblo y eso es precisamente lo que no quieren". "Y mientras tanto seguimos aquí. Somos españoles lo queramos o no, con la bayoneta en el pecho. Y a esto lo llaman patria!", se exclamó.

El ex presidente del PNV aseguró no saber si el actual proceso de paz iniciado tras el alto el fuego de ETA "saldrá bien o no" y destacó la voluntad del Gobierno socialista de solucionarlo "sin perjuicio de la unidad constitucional" cuando "eso no es de lo que se trata".

"En Euskadi hay mucha gente que no está dispuesta a aceptar un fraude como el que se ha perpetrado en Catalunya. Pero también hay que decir que ETA no conseguirá lo que en estos momentos cree que puede conseguir", concluyó.