SEGOVIA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
La escasez de precipitaciones y las bajas reservas de agua que existen en los pantanos que abastecen a la capital segoviana, el Pontón Alto y Puente Alta, motivó al Ayuntamiento de Segovia a adoptar un conjunto de medidas para restringir el consumo de agua en la ciudad.
Al término de la junta de Gobierno local, el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes (PSOE), subrayó que "jamás en la historia de Segovia" se ha vivido a estas alturas del mes de diciembre una situación de sequía tan grave. El alcalde llegó a decir que si mantiene el ritmo actual de consumo sin que entre agua en los embalses "escasamente la ciudad tendría agua para un mes".
No obstante, Arahuetes, que tildó la situación como "atípica" porque "no es normal que no haya llovido en estos meses anteriores" expresó su confianza en que las condiciones metereológicas cambien y que lleguen en los próximos días y semanas la lluvia y la nieve.
Las medidas responden a la decisión de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) de decretar el nivel de alerta en la zona de explotación del embalse del Pontón Alto, en previsión de que continúe la situación anormal de escasez de precipitaciones y a la vista de que el régimen de aportaciones de los ríos es descendente.
Arahuetes no dudó en afirmar que el otoño más seco de la década es consecuencia de los efectos del cambio climático. "Esto es muy serio, estas cosas no ocurren por casualidad, en cualquier momento se puede romper el equilibrio y llegar el desastre", advirtió Arahuetes, integrante del denominado 'ejército verde' de Al Gore y comprometido en difundir el mensaje contra el cambio climático del premio Nobel y ex presidente de Estados Unidos.
El Ayuntamiento de Segovia prohíbe desde hoy el riego con agua de la red pública en todo el término municipal, ya sea público o privado; y el baldeo de calles con agua potable; de tal manera que los servicios de limpieza viaria solo podrán tomar el agua para esta tarea del manantial de La Fuencisla, que no se abastece de los embalses.
Asimismo, se cortarán unas 25 fuentes públicas de caudal continuo; y dejarán de funcionar hasta seis fuentes ornamentales, las de las rotondas del Ambulatorio, Valdevilla, Gerardo Diego y la Plaza de Los Leones, así como las dos de la Plaza de José Zorrilla. Estas fuentes son de bombeo y, por tanto, no consumen agua continuamente sino que la recirculan, aunque mantienen cierto consumo por el cebado de las bombas.
"Esperemos que en una semana o diez días llueva, porque si no tendremos que adoptar medidas más importantes", aseguró el regidor segoviano.
El alcalde recordó que las medidas restrictivas en el consumo suelen ser habituales en Segovia en verano pero totalmente infrecuentes en estas fechas del año. Las reservas de agua están en cotas muy bajas, una situación normal a finales de verano pero "preocupante", según resaltó Arahuetes, cuando el otoño toca a su fin, ya que los meses de octubre y noviembre suelen ser de los más lluviosos del año.
Sin embargo, el mes de noviembre no se ha comportado como habitualmente lo hace, provocando que los niveles de los embalses no se recuperen como sucede otros años. "La tendencia sigue siendo descendente a un ritmo similar al del verano", añadió.
El nivel del embalse del Pontón Alto es "inusualmente bajo" para esta época del año ya que en estos momentos no tiene más que 2,14 hectómetros cúbicos de agua, poco más del 29 por ciento de su capacidad; mientras que el año pasado por esta fechas este pantano tenía 7,4 hectómetros, el total de su capacidad.
La situación no es mucho mejor en Puente Alta, que está a una capacidad del 48 por ciento (1,15 hectómetros cúbicos sobre 2,4 de capacidad total).
Según los técnicos municipales, el problema es que ambos embalses en estas fechas navideñas "ya se encontrarían al 100% si el año hidrológico hubiera sido normal", pues con las lluvias de octubre y noviembre recuperan todo lo perdido durante el estiaje (verano). A todo esto hay que sumar, según un informe al que ha tenido acceso Europa Press, que tampoco hay nieve en las cumbres, por lo que no existen reservas que permitan aumentar las reservas con el deshielo.
Arahuetes aclaró que el Ayuntamiento ya ha realizado varias pruebas en las instalaciones y conducciones de los acuíferos de Madrona, por si fuese necesario recurrir a ellos. No obstante, el alcalde aclaró que los acuíferos solo podrían abastecer de forma continua a un 30 por ciento de la población de la ciudad de Segovia, que cuenta con unos 55.000 habitantes, por lo que, si los embalses se quedan sin reservas y es preciso abastecerse de los acuíferos, se deberían adoptar medidas de restricción en el consumo de agua mucho más severas.
