Considera "la mayor degradación moral" que mujeres socialistas hayan firmado junto a Batasuna un manifiesto común
MADRID, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) consideró hoy que la marcha de este mediodía en San Sebastián, convocada por un grupo de ciudadanos para protestar por la prohibición del acto de Batasuna en el Kursaal de la capital donostiarra, constituye "un fraude" a la decisión del juez Fernando Grande-Marlaska y demuestra que la "estrategia" de la formación ilegalizada consiste en "buscar algún tipo de resquicio legal desafiando la ley" para llevar a cabo sus propósitos.
En declaraciones a Europa Press, el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, anunció que buscarán "responsabilidades" e investigarán quiénes están detrás de la convocatoria de la marcha de hoy, donde, según él, se ha manifestado "impunemente una banda terrorista".
Alcaraz admitió no obstante que en esta ocasión Batasuna no ha podido llevar a cabo el propósito que pretendía con el acto prohibido en el Kursaal de San Sebastián, donde tenía previsto presentar su nueva Mesa Nacional, pero subrayó que si esto no ha sido posible es gracias a la actuación del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, frente a un fiscal general del Estado que "mira para otro lado", añadió en alusión a Cándido Conde-Pumpido.
El presidente de la AVT calificó por otra parte como "la mayor degradación moral" el hecho de que varias mujeres miembros del Partido Socialista hayan firmado un documento, "indistintamente" de su contenido, junto "a una banda terrorista como Batasuna-ETA" porque, "hoy por hoy Batasuna sigue siendo ETA".
Además, denunció que el Gobierno socialista "no haga nada para evitar o tomar represalias contra quienes firman un documento con ETA", lo que quiere decir, según él, que el Ejecutivo "coincide" con ese texto o quiere "no molestar a ETA" para seguir adelante "con ese proyecto de rendición" ante los terroristas.
Alcaraz se refería así al texto rubricado ayer por cerca de 200 mujeres de partidos y sindicatos de Euskadi y Navarra --excepto del PP y UPN--, en el que se comprometen a ser "voces para la paz" y expresan su intención de "colaborar en la búsqueda de soluciones" a través de "un diálogo sin prejuicios y sin condiciones" que permita el desarrollo de todos los proyectos y el respeto a la decisión de los vascos, incluso si se trata de un cambio de marco jurídico-político.
Entre las firmantes, a título individual, figuran Gemma Zabaleta, Idoia Mendia o Susana García Chueca, del PSE-EE; Julia Cid, Lourdes Montero y Ainhoa Aznarez, de PSN; Jone Goirizelaia (Batasuna) y Nekane Erauskin, Ainara Epelde y Ane Auzmendi, del Partido Comunista de las Tierras Vascas.
