Oleaga dice que debería "haber concluido definitivamente" con el informe del Ministerio Fiscal, que "no admite réplica"
BILBAO, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consejero vasco de Justicia, Joseba Azkarraga, lamentó hoy que al terrorismo de ETA ha generado "una legislación de índole excepcional" y destacó que la "respuesta" a este fenómeno no "puede poner en peligro las garantías ni las libertades básicas de un Estado de derecho". En este sentido, censuró que el caso Egunkaria es "un proceso absurdo" que ha mantenido "dilaciones injustificadas" y supone "un claro acto de injusticia fruto de una más incidencia política que jurídica".
Azkarraga participó, en representación del Gobierno vasco, en la inauguración de unas jornadas sobre el caso Egunkaria, organizadas por el Colegio de Abogados de Bizkaia. El foro de debate contó también con la intervención del decano del Colegio de Abogados, Nazario Oleaga, el presidente de Euskaltzaindia, Andrés Urrutia, el catedrático de Derecho Penal de la Universidad de Utrech John Vervaele, y el ex decano del Colegio de Abogados de Madrid Luis Martí.
En su intervención, el consejero vasco censuró el cierre de este periódico, así como las clausuras de Egin y Egin Irratia, se produjo como consecuencia de medidas cautelares y no en base a sentencias firmes, si bien "tuvieron efectos definitivos e irreversibles".
Tras destacar que el cierre de un periódico es "de gravedad extrema", destacó "el agravante" de "una instrucción que se alarga en el tiempo durante años y que pone en cuestión el derecho a un proceso justo sin dilaciones indebidas".
En este sentido, advirtió de que "la medida cautelar se convierte materialmente en una pena adelantada que consolida una situación de cierre de los medios sin que haya existido la más mínima garantía de respeto a derechos que son efectivamente vulnerados".
El consejero recordó que, ante la "gravedad de estas cuestiones", se incluyeron en el Plan de Paz y Convivencia del Ejecutivo vasco y su Departamento impuso un análisis sobre el modo en el que "se está produciendo una redistribución de los límites de las libertades de expresión y de información".
En este contexto, lamentó que "el fenómeno terrorista de ETA ha generado desde hace décadas una legislación de índole excepcional". "Yo creo que toda actividad terrorista precisa, sin duda, una respuesta. Pero es igualmente cierto que con ella no se puede poner en peligro las garantías ni las libertades básicas de un Estado de derecho", apuntó.
En este sentido, destacó que "la grandeza moral de la democracia reside, precisamente, en que la defensa de la libertad se somete a límites más allá de los cuales anida el riesgo de que se desborde la violencia institucional".
Joseba Azkarraga manifestó que los estados democráticos deben "responder desde parámetros de normalidad y con sometimiento al principio de igualdad y de respeto a los derechos de todas las personas". A su enetnder, "no es una cuestión baladí la de atinar dónde está el punto medio entre la lucha antiterrorista y el legítimo espacio de la libertad de opinión, expresión e información".
CONCLUIR CON EL INFORME FISCAL
Por su parte, Nazario Oleaga consideró "triste y tremendo", transcurridos cinco años desde el cierre del diario, cómo ha concluido la instrucción del procedimiento sumarial del caso, que "para muchos de nosotros" debería haber finalizado "definitivamente como consecuencia del informe del Ministerio Fiscal, que no admite desde el punto de vista jurídico réplica, en el que de forma clara se hace un estudio pormenorizado de las conductas de las personas implicadas en el sumario" y a pesar del cual "se encuentran con la intranquilidad de tener un procesamiento encima".
El decano del Colegio de Abogados de Bizkaia destacó que "no puede ser de aplicación nunca el 'todo vale'", sino que es preciso regirse por "las normas que regulan nuestra convivencia" contemplando "el espíritu en el que las que han sido dictadas". De este modo, insistió en que la justicia "no puede consentir el exceso en la aplicación de este espíritu".
"GRAVE PERJUICIO" AL EUSKERA
Por su parte, el presidente de Euskaltzaindia, Andrés Urrutia, destacó "el grave perjuicio" que, a su entender, ha supuesto para la lengua y la cultura vascas, destacando que el impulso del euskera requiere una prensa "propia y plural". En su opinión, "establecer cortapisas" en este sentido "no es síntoma de madurez social ni desarrollo democrático".
Tras afirmar que "no es comprensible" la dilación de un proceso que afecta a "los derechos y libertades", animó a continuar en "la tarea en pro de la cultura vasca" y "resistir el desaliento que puede asaltar".
