Vaticina que el PSOE "mejorará" sus resultados en las próximas elecciones, municipales, autonómicas y generales
SEVILLA, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, criticó hoy con dureza el "discurso apocalíptico e irreal" del líder de la oposición, Mariano Rajoy, al que ve "cada vez más parecido a la antigua Alianza Popular", y le acusó de realizar "soflamas tremendistas" en las que presenta una "España imaginaria en la que el Estado se rompe, mientras no habla" de las preocupaciones reales de los ciudadanos.
Según Blanco, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero sí se ocupa de estas preocupaciones y, por ello, está impulsando "la política social más activa, potente e innovadora que se ha practicado en España desde hace muchos años".
Blanco inició su intervención, en la sesión de apertura de la VI Convención Municipal, que se celebra este fin de semana en Sevilla, proclamando que "aquí sí hay mucho futuro, el que no hubo el pasado fin de semana en la convención del PP", y trasladando a los alcaldes y concejales allí congregados que el partido "está en condiciones de mejorar los resultados conseguidos" tanto en las anteriores elecciones municipales y autonómicas", como en las elecciones generales de 2008.
"A estas alturas nadie duda del resultado de las elecciones de 2008. La única duda que existe tras la Convención del PP es si Rajoy será el candidato del PP y de la derecha", señaló el dirigente socialista, que se mostró convencido de que "Zapatero seguirá siendo el presidente del Gobierno de España, mientras que Mariano Rajoy ni siquiera tiene asegurado que va a seguir siendo el líder de la oposición".
Aunque comprende a quienes piensan que "lo mejor que nos puede pasar es que Rajoy sea el líder de la oposición", Blanco señaló que, "pensando en el interés de la sociedad, España necesita una oposición sensata, y no desesperada, serena y no exaltada, un líder de la oposición cuya estrategia consista en transmitir confianza y no en contagiar a la sociedad de su propia irritación y despecho personal por haber perdido el 14-M".
"CADA VEZ SE PARECE MÁS A LA ANTIGUA AP"
"Lo más grave que le ha pasado al PP en este tiempo es tener un presidente radical, con un discurso radical y con un equipo dirigente aún más radical, que se parece cada vez más a la antigua AP", subrayó el número dos del PSOE, que puso de manifiesto que los populares "defienden todos los días el mismo discurso de los años 77, 78 y 80 cuando cuando se iba a aprobar el Título VIII de la Constitución", y censuró con dureza la "campaña demagógica que lanzan todos los días contra Cataluña y siempre utilizando como fórmula la injuria y la mentira hacia los adversarios políticos".
Por todo ello, Blanco concluyó que "mientras España avanza hacia el futuro, el PP cabalga hacia el pasado", ya que resaltó que la convención que celebró este partido el pasado fin de semana "ha sido el último triunfo de Aznar y el fracaso definitivo de Rajoy".
Recordó que "ni una sola reforma importante ha contado inicialmente con el apoyo y el voto del PP o de la antigua AP porque a todas han ido arrastrando los pies y en todas han visto peligros y amenazas", pero garantizó que "nadie va a parar el actual proceso de reformas y cambios porque es lo que votaron los ciudadanos el pasado 14-M y nosotros nos debemos a los ciudadanos que nos dieron su voto".
Tras poner de manifiesto que "todo el mundo sabe que con este Gobierno el crecimiento económico va a acompañado de la política social más activa, potente e innovadora que se ha practicado en España desde hace muchos años", el dirigente socialista se mostró convencido de que un Gobierno del PP "jamás hubiera propuesto" leyes como la de Dependencia, Igualdad o contra la Violencia de Género, no destinaría más de la mitad del gasto público a políticas sociales ni se habría "atrevido" a retirar las tropas de Irak o a "impulsar" la Alianza de Civilizaciones.
Como prueba de esta línea de acción política, Blanco se refirió a la "bajada de impuestos" aprobada ayer por el Consejo de Ministros, que beneficia "especialmente a la gente que tiene rentas del trabajo" y afecta también al Impuesto sobre Sociedades "para que nuestras empresas puedan ganar en competitividad" y se pueda avanzar decididamente en el objetivo de lograr un "más calidad y estabilidad en el empleo".
