MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, defendió hoy la decisión del Gobierno de comprar suelo a inmobiliarias por 300 millones de euros para promover vivienda protegida porque facilitará el acceso a la vivienda, al tiempo que culpó a la política de suelo "disparatada" del PP de las dificultades hipotecarias que viven algunas familias.
En rueda de prensa en la sede socialista de Ferraz, Blanco dijo que la medida "se inscribe dentro del esfuerzo para poner a disposición de los ciudadanos más vivienda protegida" y "ayudará a facilitar una vivienda digna a un precio justo".
El propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, destacó esta mañana que la decisión "no tiene nada que ver con la situación de ninguna inmobiliaria", cuando se le preguntó si esta medida era una forma de ayudar a Martinsa-Fadesa, que está en situación de concurso de acreedores.
Así, ante las críticas lanzadas por el PP, que opinó hoy que con esta medida el Gobierno se dedica "a auxiliar a las empresas" y no a las familias, Blanco afirmó que los 'populares' sólo están siendo consecuentes con la política de suelo que desempeñaron en sus años de Gobierno.
En este sentido, subrayó que en los años de Gobierno del PP se produjo la "mayor subida del precio del suelo y de la vivienda" en virtud de la Ley del Suelo de 1998 y culpó a su política "disparatada" los problemas hipotecarios que afrontan las familias con la subida del Euríbor.
"La decision del PP de no favorecer la vivienda protegida y no poner suelo barato a doisposción de la vivienda protegida obligó a que muchas familias se tuvieran que hipotecar e exceso", argumentó.
Además, Blanco recalcó que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha señalado que hay una necesidad de poner suelo a disposición de la construcción de vivienda protegida, con lo que "desmiente argumento del PP sobre que no era necesario".
El dirigente socialista añadió que los 'populares' "nunca creyeron en la vivienda a precio asequible" y que ven el suelo "como un activo para la especulación" y la vivienda "como una mercancía" y no "como un derecho" como creen los socialistas.