El BNG insta a eliminar de los centros educativos y del resto de edificios públicos los símbolos y nombres fascistas

Actualizado: domingo, 2 diciembre 2007 19:32

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Parlamentario del BNG, a través de la iniciativa de dos de sus diputados, Manuel Parga y , presentó una proposición no de ley para su debate en el Parlamento y otra para ser tratada en comisión, en las que se insta a eliminar de los centros educativos y del resto de edificios públicos toda simbología fascista.

Los diputados nacionalistas recordaron en su exposición que en Galicia aún permanecen centros educativos y otros edificios públicos que conservan símbolos de la dictadura, "nombres y símbolos que exaltan un régimen opresor, que se caracterizó por la falta de libertades y que promovió valores totalmente opuestos a los democráticos", especificaron.

Asimismo, en opinión de los parlamentarios del Bloque, resulta "penoso" para cualquier demócrata constatar "esta flagrante y ofensiva pervivencia después de tantos años", siendo "especialmente grave" en lo que afecta a los centros educativos e inmuebles públicos que "deben permanecer ajenos a un régimen que privó de libertad a los ciudadanos", afirmaron.

Así, nombres como los del CEIP Francisco Franco, en Beariz (Ourense); CEE Carmen Polo de Ferrol (A Coruña) y, fuera del ámbito educativo, el hospital Juan Canalejo, de A Coruña, son según los nacionalistas una muestra de la "pervivencia de elementos que exaltan una época de persecuciones y de falta de libertades individuales y colectivas".

Además, añadieron que es necesario eliminar estos símbolos, nombres y valores de una sociedad y de un sistema educativo que se "debe regir por valores democráticos y de respecto a la pluralidad".

Por último, explicaron es "necesario" aplicar con "rapidez" estas disposiciones que tras la aprobación de la Ley de la Memoria Histórica en las Cortes del Estado, así como la aprobación de una proposición no de Ley en Parlamento Gallego en diciembre del año pasado, que instaba a retirar progresivamente de los edificios públicos y centros dependientes de la Administración las denominaciones que hicieran referencia a hechos relacionados con el franquismo.