Prefiere un buen acuerdo que esclavizarse en plazos, incluso más allá de tres meses
BARCELONA, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, subrayó hoy que la financiación no la pacta un partido, sino un Gobierno, refiriéndose así al acuerdo entre ICV y el Ejecutivo central para evitar que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tenga que comparecer en el Congreso a cambio de que lo haga el ministro de Economía, Pedro Solbes, y del compromiso de acordar un modelo de financiación para Cataluña antes de tres meses.
En declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press, Carod desvinculó la estrategia parlamentaria de cada partido de la negociación para lograr un modelo de financiación. "Una cosa son los movimientos que cada partido pueda hacer en función de sus intereses y la otra es pensar que de la decisión de un solo partido, más aún con un número concreto de diputados como es éste, que es uno solo, eso pueda condicionar la financiación", argumentó.
Carod pidió que se separen ambas cosas, e insistió en que las reuniones para pactar el nuevo modelo de financiación las hacen los gobiernos, y no los partidos por separado. "Nadie puede pensar que la financiación depende de lo que diga ICV, ERC, el PSC o CiU", continuó.
El ex presidente de ERC opinó que el frente común de los partidos catalanes no se ha roto con esta decisión de ICV, ya que a nivel estatal, cada partido tiene sus propios criterios. Precisó que donde Cataluña no se puede permitir "ninguna brecha" es en la acción conjunta para obtener una buena financiación.
UNIDAD Y SERENIDAD
Reclamó "unidad y serenidad" a la hora de negociar la financiación y que se priorice la calidad del acuerdo al plazo. "No nos esclavicemos con el tiempo, en lo que sí nos tenemos que fijar es en aquello que acordamos", explicó Carod, que subrayó que Cataluña "no puede llegar a un mal acuerdo".
Por ello, prefirió un buen acuerdo al que se llegue en seis meses que uno malo que se pacte en menos tiempo y denunció que el Gobierno ya ha incumplido el Estatut al superar el plazo del 9 de agosto.
"Cataluña no se tiene que levantar de la mesa hasta que no haya un buen acuerdo", insistió el vicepresidente del Gobierno autonómico, que añadió: "Las negociaciones no se tienen que romper nunca, pero lo que no podemos aceptar es que el acuerdo esté por debajo de lo que necesitamos".
Además, pidió que nadie "utilice como chantaje hacia Cataluña las prisas o que todas las comunidades ven bien" un determinado acuerdo. "Que nadie nos diga a nosotros qué es lo que tenemos que firmar", reclamó Carod, que dejó claro que "las cosas no pueden continuar como hasta ahora". "Solidaridad sí, tomadura de pelo, no", aseveró.
Por otro lado, indicó que cada partido es autónomo a la hora de decidir si vincula un buen modelo de financiación al voto de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
