Caso Atutxa.- Knörr dice que es "la victoria de una causa justa" y que deberían estar acusados los jueces del Supremo

Actualizado: viernes, 5 enero 2007 19:03

BILBAO, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -

El ex miembro de la Mesa del Parlamento vasco, Gorka Knörr, mostró hoy su esperanza en que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco sobre el 'caso Atutxa', que le absuelve de un delito de desobediencia, "sea el preludio de una victoria final en una causa justa" en la que se han visto acusados "miembros dignos de un Parlamento, mientras que los que debieron haber sido sentados en el banquillo, los magistrados del Tribunal Supremo, que cometieron una prevaricación absoluta iniciando la causa, están todavía en sus puestos".

En declaraciones a Europa Press, Knörr indicó que este proceso judicial "es una causa que jamás se debió abrir". Además de Gorka Knörr, el sindicato Manos Limpias había acusado de desobediencia al que fuera presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, y a la miembro de la Mesa Kontxi Bilbao, por negarse a disolver al Grupo de Sozialista Abertzaleak.

"Sigo pensando lo mismo que pensaba el primer día, que se trata de un proceso iniciado a instancias de un tribunal como el Tribunal Supremo que no tiene ninguna jurisdicción sobre actos legislativos de la Cámara vasca, ni de ninguna otra cámara. Se trata de una causa absurda, antidemocrática e indigna de un sistema que se autodenomine como democrático", criticó.

Además, Knörr consideró "absolutamente demencial" lo que entiende como una "falta de jurisdicción del Supremo", que, a su entender, ha sido "llevado de la mano de un sindicato fascista, que volvió a instar a que se juzgara sobre el fondo de la cuestión".

Asimismo lamentó que la absolución dictada por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco no haya sido por unanimidad de la sala. "No parece lógico que haya votos particulares cuando la Junta de Portavoces del Parlamento vasco fue absuelta por la misma causa y cuando toda la argumentación judicial y mediática de la derecha fue que había una connivencia expresa entre dicha Junta de portavoces y la Mesa del Parlamento", concluyó.