MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un centenar de personas accedieron hoy al interior de la cárcel de Carabanchel, bajo lo que queda de la cúpula, para reclamar que parte del antiguo penal, como alguna de las galerías, se mantenga para construir en él el Centro por la Memoria como homenaje a los represaliados del franquismo, señalaron fuentes vecinales a Europa Press.
Estos vecinos del distrito forman parte del millar que hoy participó en la concentración de protesta organizada a las puertas del centro para reclamar la construcción de este centro aunque ya no será en la cúpula, como demandaban, al ser parcialmente demolida en la noche de ayer.
"Queremos que algo de la cárcel quede como homenaje a los que pasaron por aquí en su lucha por la libertad", declaró Julián Rebollo, de la Asociación de Vecinos de Aluche. De la misma opinión es el represente de los vecinos de Carabanchel Alto, Pedro Casas, que aseveró que en este momento "la situación es tranquila porque las máquinas no están trabajando".
En la noche de ayer estas máquinas derribaron la mitad de la cúpula causando un gran estruendo que hizo que muchos de los vecinos de la zona alarmaran al 112 por temor de que algo grave hubiera sucedido en el interior de la antigua cárcel.
Instituciones Penitenciarias indicó en un comunicado que los trabajos de demolición del antiguo centro penitenciario se desarrollaban "con total normalidad y a buen ritmo". Según explicaron, ya se ha derribado parte del edificio, incluida la mitad de la cúpula. Las mismas fuentes negaron cualquier tipo de accidente en la caída de la cúpula.
Pedro Casas adelantó que las movilizaciones a favor del centro por la memoria continuarán: el próximo acto tendrá lugar el 8 de noviembre, con una gran manifestación convocada por colectivos vecinales de Latina y Carabanchel y la plataforma en defensa del centro por la memoria.
También han recurrido a la vía legal al llevar al Juzgado contencioso-administrativo número 22 la solicitud para impugnar la licencia otorgada por el Ayuntamiento de Madrid a Instituciones Penitenciarias para llevar a cabo el derribo.
Asimismo han recurrido a Comisiones Obreras, que demandará en Inspección de Trabajo la situación del derribo de la cárcel de Carabanchel al considerar que "no se siguen los protocolos de seguridad para demoliciones" y que parte de estos trabajos se realizan por la noche, con su consiguiente falta de iluminación y riesgo para la seguridad de los trabajadores.
