'Charlie' hace realidad su sueño de volar en un avión militar a bordo de un CN235 de la Fuerza Aérea

Actualizado: viernes, 2 marzo 2007 20:11

BASE AÉREA DE VILLANUBLA (VALLADOLID), 2 Mar. (EUROPA PRESS) -

José Carlos Carballo Clavero 'Charlie', un vallisoletano que desde hace ocho años está inmovilizado como consecuencia del denominado 'síndrome de cautiverio' cumplió hoy su sueño de volar en un avión militar con un 'bautismo aéreo' a bordo de un CN235 del Ala 35 de la Fuerza Aérea española.

Ataviado con el uniforme de vuelo del Ejército del Aire, con el distintivo 'Charlie' sobre el emblema de la Fuerza Aérea, el vallisoletano emuló el saludo militar antes de embarcar en la aeronave para despegar a las 17.05 horas, acompañado por su mujer, Purificación, a bordo de uno de los aviones que, como él mismo relato minutos antes de su 'bautismo aéreo', había divisado sobrevolando el cielo vallisoletano junto a su madre cuando era niño.

Durante los 40 minutos que duró su primera experiencia aérea, 'Charlie' observó junto a su mujer su ciudad, Valladolid, su propia vivienda y otros paisajes castellanoleoneses, antes de aterrizar en la pista de la Base Aérea de Villanubla, donde, además del jefe de la base, el coronel Palacios, le esperaba un nutrido grupo de periodistas que le aclamó cuando descendió de la aeronave.

Visiblemente emocionado, el vallisoletano reconoció que la experiencia había sido "mucho mejor" de lo que había previsto, explicó que se había sentido "en una nube", y no dudó a la hora de responder que volvería a repetir la experiencia, que había deseado desde su niñez.

Minutos antes de su 'bautismo aéreo', 'Charlie', por medio de un programa de ordenador que le permite comunicarse al igual que el sistema de signos basado en el movimiento de sus párpados, relató cómo siempre quiso ser aviador de la Fuerza Aérea, cómo el primer juguete que recuerda es un pequeño avión militar y cómo con el paso del tiempo ha conservado esa afición por la aviación, ahora hecha realidad, coleccionando maquetas y comprando revistas en idiomas que no conocía para poder maravillarse con las fotos de aeronaves.

'Charlie' reconoció que sentía "demasiada ilusión" por su 'estreno' con la Fuerza Aérea y agradeció la oportunidad que le ha brindado el Ejército del Aire y el director cinematográfico y periodista, Miguel González Molina, autor del documental 'Verbos', basado en la experiencia vital de 'Charlie' y Purificación. Por su parte, el jefe de la Base Aérea de Villanubla, el coronel Javier Palacios, le dio la bienvenida a "su casa" y elogió su espíritu de superación, una cualidad "admirada" por todos los integrantes de la Fuerza Aérea española.

El jefe de prensa del Ejército del Aire, el teniente coronel Nicolás Murga, recordó a su amigo 'Charlie' que cuando era pequeño divisiba los mismos aviones que hoy iba a tener oportunidad de sentir y su madre le decía que cada avión que despegaba nacía una nueva vida y le pidió que continuara siendo tal y como es, manteniendo "esas ganas de vivir" en un mundo que, gracias a personas como él, "sigue siendo un mundo hermoso".

Víctima de un doble infarto cerebral a los dos meses de casarse, 'Charlie' está afectado por el 'síndrome de cautiverio', una patología que le aboca a un estado de inmovilidad e incomunicación casi totales (no puede mover casi ninguna parte de su cuerpo ni hablar) pero que no ha mermado en ningún modo sus facultades mentales.

Manteniendo intacta su capacidad de sentir y razonar, con una mente sana encerrada en un cuerpo inmóvil, 'Charlie' presentará esta tarde en Salón de Actos de Caja de España Valladolid el documental 'Verbos', en el que relata cómo acepta su situación y trata de mejorarla, con el permanente apoyo y amor de su mujer, con la que ha conseguido desarrollar un impresionante sistema de comunicación --un programa informático dirigido con el único movimiento que puede hacer con un dedo de su mano derecha-- y se ha embarcado en ambiciosos proyectos como la publicación de su segundo libro, centrado en ayudar a las personas que están en una situación parecida a la suya.

También ha desarrollado otro método de comunicación su primera obra, titulada 'El síndrome de cautiverio en zapatillas', publicada en 2005, supone un fiel testimonio de su afán de superación y de ayudar a otras personas que padecen su misma enfermedad, así como a sus familiares y amigos.

'Charlie' afronta en la actualidad un nuevo reto, la fundación de una asociación para afectados por el 'síndrome de cautiverio', centrada en un doble objetivo: "impulsar el desarrollo de proyectos de investigación dirigidos a la consecución de una autonomía personal" de los afectados por esta enfermedad y "dar a conocer a la sociedad los efectos" del síndrome y las "necesidades" de los enfermos.