BARCELONA, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
CiU y PP apuestan en sus programas electorales por que el conocimiento de la lengua y las costumbres sean requisitos para obtener el permiso de residencia para los inmigrantes. El PSC propone que la Generalitat intervenga en las políticas estatales, ERC quiere el control de flujos migratorios, mientras que ICV-EUiA defiende el derecho a voto de este colectivo.
Al margen de la lengua, CiU condiciona el permiso de residencia permanente al cumplimiento "efectivo" de las normas democráticas de convivencia, como la escolarización de los hijos o la igualdad entre hombre y mujer.
Otras de las propuestas es apostar por la contratación en origen y "restringir" la llegada de inmigrantes sin trabajo. La formación nacionalista reclama para la Generalitat la competencia ejecutiva y ser la que determine el contingente de trabajadores extranjeros.
Por su parte, el PP propone que los extranjeros participen en un concurso de puntos para conseguir los visados de trabajo, puntos que se establecerán según el nivel de integración a través de variantes como el conocimiento de la lengua, la experiencia profesional y el "conocimiento del sistema legal español, su historia y su cultura", entre otros.
Después de este permiso de un año, el PP propone para los inmigrantes que quieran establecerse en España un contrato de integración, en el que el inmigrante "se comprometerá a cumplir las leyes y respetar los principios, valores y costumbres de los españoles, a aprender la lengua, a pagar sus impuestos y cotizaciones, a trabajar activamente para integrarse y a retornar a su país si durante un tiempo carece de empleo y de medios".
Entre las medidas de los populares también están la "política de control de fronteras" y el rechazo de los procesos de regularización masiva, al considerar que el emprendido por el PSOE ha convertido a España "en uno de los destinos preferidos de las mafias que trafican y explotan a las personas".
PSC APUESTA POR LA COOPERACIÓN.
Entre las propuestas del PSC están la creación de una Agencia Estatal de Migraciones para agilitar los trámites, en la que participaría la Generalitat para ejercer las competencias en materia de concesión del permiso inicial de trabajo y apuestan por intensificar la coordinación entre las administraciones migratorias y laborales del Estado y el Govern.
Además, considera necesario incrementar la política de acuerdos y de cooperación con los países de mayor procedencia de la inmigración y por que los trámites de los reagrupamientos familiares se realicen en un plazo máximo de dos meses.
Desde ERC, su candidato, Joan Ridao, defiende que la Generalitat tenga todas las competencias en materia de inmigración -excepto la de fronteras y concesión de nacionalidad--, entre las que consideran que debe incluirse la de contratación en origen.
Ridao, partidario del "control de flujos" migratorios, aboga por "hacer posible que entren en Catalunya tantas personas como dignamente se pueda mantener". Otras de las propuestas de ERC son la reducción de 10 a 5 los años necesarios para la consecución de la nacionalidad española, reconocer el derecho de voto de los inmigrantes a las elecciones locales y favorecer el retorno voluntario a los países de origen, entre otras cosas.
ICV DEFIENDE EL DERECHO A VOTO.
Una de las principales apuestas en materia de inmigración incluida en el programa de ICV-EUiA es la consecución del derecho a voto para las personas inmigrantes "en todas las elecciones", estableciendo un mínimo de un año de permanencia para las municipales y de tres para el resto.
Entre otras medidas, contemplan la "apertura de las vías" para le regularización de los inmigrantes que residen en España en situación irregular y la eliminación del procedimiento sumario de expulsión. En general, solicitan un "verdadero" reconocimiento de los derechos y libertades fundamentales y que el concepto de ciudadanía "vincule también" a las personas inmigrantes.
PLAN NACIONAL DE INMIGRACIÓN DE C's.
Por último, C's recoge en su programa la creación de un Plan Nacional de Inmigración, "consensuado" con todas las fuerzas políticas, y la creación de un visado temporal de residencia y trabajo con un máximo de cinco años, después de los cuales aquellos que continúen con contrato en vigor y acrediten recursos fijos y regulares "podrán acceder al estatus de residente de larga duración".
Propone también el aumento de los efectivos de la policía de fronteras, disminuir los países incluidos en el programa de exención de visados, rechazan las medidas que favorezcan procesos de regularización masivas y defiende el derecho de los inmigrantes a votar en las elecciones locales. C's considera que la integración "se favorece mediante el conocimiento básico del idioma, la historia y las instituciones de acogida del país".
