El compañero de piso de Ghalyoun desmonta su coartada y después dice que rezaban juntos a la hora del atentado

Actualizado: martes, 20 febrero 2007 22:00


MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El juicio por los atentados del 11-M de Madrid celebró hoy su cuarta jornada de sesiones ante la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional, en la que declararon tres de los 19 procesados por estos hechos, acusados de integración en la célula terrorista que perpetró la masacre, entre otros delitos. Uno de ellos, Fouad el Morabit, contradijo la coartada de uno de los presuntos autores materiales, Basel Ghalyoun (en l imagen), al decir que el 11 de marzo de 2004 no vio a su compañero de piso hasta las once de la mañana. Después rectificó y aseguró rezaron juntos a la hora en la que explotaron los trenes.

Fouad El Morabit, para quien la Fiscalía solicita 12 años de prisión por integración en organización terrorista, residía en el momento en que se produjeron los atentados con Ghalyoun en un local situado en la calle Virgen del Coro, en el madrileño barrio de la Concepción, donde se realizaban presuntamente reuniones dirigidas a alentar la yihad.

Según explicó ayer el acusado de colocar las mochilas-bombas en los trenes de cercanías, la mañana del 11 de marzo despertó a su compañero sobre las siete y media de la mañana para rezar. No obstante, El Morabit aseguró hoy a preguntas de la fiscal que no vio a Ghalyoun hasta las once de la mañana. A preguntas de su abogada, Eva Aragón, El Morabit rectificó esta versión y dijo que ese día rezó junto a su compañero pasadas las seis de la mañana y que volvió a verle cuando le despertó alrededor de las diez.

"CREÍ QUE FUE ETA".

En otro momento de su declaración, El Morabit dijo que cuando ocurrieron los hechos él pensó en ETA como responsable de los mismos, "al igual que hicieron otros ciudadanos".

El Morabit insistió durante toda su declaración que nunca relacionó los atentados con Sarhane Ben Abdelmajid , "Serhane El Tunecino" --presunto jefe de la célula terrorista que se suicidó en Leganés--, ya que a pesar de sus ideas extremistas, no le consideraba una persona violenta.

El acusado afirmó que su fe mulsulmana no es compatible con lo ocurrido en Madrid el 11 de marzo de 2004 y que él se describe incluso como "demasiado pacífico". Añadió que su padre es notario en Marruecos, que tiene más amigos españoles que árabes y que, además del árabe y el bereber, habla inglés, francés y alemán.

A lo largo de su declaración, negó de forma reiterada que en la casa de la calle de Virgen del Coro -donde según la investigación se celebraban reuniones de carácter islamista radical- hubiera libros sobre Bin Laden o relacionados con el radicalismo islámico o que se celebraran reuniones de extremistas. "Vivía allí desde diciembre de 2004, y sabía todo lo que pasaba. No había reuniones", subrayó.

ALMALLAH DABBAS

Antes de la declaración de El Morabit declaró ante el tribunal otro de los presuntos integrantes del grupo, Mouhannah Almallah Dabbas, que indicó que la aparición de anotaciones manuscritas suyas en unas cintas de cassette encontradas en el piso de Leganés, donde se suicidaron siete terroristas islamistas el 3 de abril de 2004, podría deberse a que uno de los inquilinos del local de su propiedad, situado en la calle Virgen del Coro de Madrid, Rifaat Anouar --uno de los suicidas--, llevara "esas cosas" a la casa de la calle Carmen Martín Gaite.

No obstante, Almallah Dabbas, que se afilió al PSOE tras los atentados e indicó que simpatizaba con los denominados Hermanos Musulmanes, aseguró, al ser preguntado por si era propietario de cintas de video en las que se mostraban escenas violentas relacionadas con la 'yihad', que dispone de gran cantidad de cintas en su vivienda. "Tengo también películas porno", añadió.

El acusado intentó, además rebatir las acusaciones en su contra realizadas por su ex novia Nouza Hauza, testigo protegido cuya declaración le incriminó en los atentados, y dijo que ésta presentó en varias ocasiones "denuncias falsas" por maltrato en su contra. "Yo la denuncié a ella por robo", añadió y explicó que además de llevarse varias de las pertenencias que se encontraban en el local de la calle Virgen del Coro realizó llamadas a su cargo por valor de más de 2000 euros.

Según Almallah Dabbas, Nouza trabajaba como prostituta cuando la conoció en Tánger. "Me comió el coco" --dijo el acusado-- que calificó a su ex novia como "una mujer mala". La testigo, que declaró durante la instrucción del sumario de la causa en contra del acusado, vivió según Almallah Dabbas durante aproximadamente un mes en casa de "Serhane El Tunecino", que pretendía reconciarles, y tiene un hijo con el procesado.

El procesado negó todas las acusasiones en su contra y dijo no haber estado nunca en las casas de Morata de Tajuña y Leganés. Añadió que no ha viajado ni Afganistán ni a Bosnia y no ha intentado convencer a jóvenes para que viajaran a países árabes con objeto de emprender la "yihad". Explicó, además que sus hijos (cuatro de su mujer legal, Turia, y uno de su ex novia) acuden a un colegio público de Madrid y no asisten a clases de educación islámica aunque van a la mezquita de la M-30 donde reciben lecciones de árabe.

EL GHANOUI

El último de los acusados en declarar durante la jornada fue Otman El Ghanoui, quien, según la Fiscalía, participó en el traslado de los explosivos utilizados en los atentados desde Asturias hasta la vivienda de Morata de Tajuña donde se prepararon los artefactos, así como en las obras de habilitación de dicha finca. Está acusado de los delitos de pertenencia a organización terrorista, suministro de sustancias explosivas y falsificación de documentos oficiales, por los que la fiscal Sánchez pide un total de 24 años de prisión.

Este acusado reconoció que realizó obras de reforma en la finca de Morata de Tajuña donde se prepararon los explosivos utilizados en los atentados del 11-M y que en la casa coincidió con varios de los integrantes de célula que se suicidaron el 3 de abril en Leganés, entre ellos Rifatt Anouar y los hermanos Aulad Akcha.

Indicó, además, que realizó un viaje a Burgos con estos últimos y junto a Jamal Ahmidan, alias "El Chino", en dos vehículos aunque no supo explicar los motivos del desplazamiento. Negó que actuara como vehículo lanzadera al igual que indicó desconocer por qué se trasladó "El Chino" posteriormente a Asturias.

Justificó la aparición de su ADN mezclado con el de Rifaat en unas prendas de ropa abandonadas en la estación de tren de Vicálvaro, indicando que en múltiples ocasiones dejaba ropa suya en la finca de Morata de Tajuña de donde cualquiera puso cogerla.

Se defendió de la acusación de falsificación de documentos oficiales y dijo haber extraviado su documentación durante la realización de las obras de reforma. Agregó que no sabía "nada" de la aparición porterior de sus papeles, en los que se habían practicado modificaciones, como la inclusión de una fotografía de Jamal Ahmidan en lugar de la suya.

"SERHANE" EL RADICAL

Tanto El Morabit como Almallah Dabbas describieron a Sarhane Ben Abdelmajid, alias "Serhane El Tunecino", como "un radical" y admitieron que le escucharon en ocasiones realizando comentarios sospechosos. Mientras que Almallah Dabbas explicó que le oyó amenazar con "matar a policías", El Morabit dijo que se enteró de que comentó que iba a ocurrir "algo fuerte" en Madrid.