El reo fue absuelto en 2004 de los delitos de asesinato y homicidio por la muerte en 2002 de dos comerciantes junto al Puente de Praga
MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 17 años de prisión a John Danilo P.C., un hombre de nacionalidad colombiana que en agosto de 2002 mató de 25 puñaladas al camarero del bar 'JM', sito en el distrito de San Blas, con el fin de apropiarse de la recaudación de la caja, que ascendía a 1.113 euros.
Así lo acuerda la sección cuarta de la Audiencia madrileña en una sentencia que considera a John Danilo autor de un delito de homicidio y uno de robo por los que, además de la pena de cárcel, deberá indemnizar a la esposa de la víctima en 180.000 euros y al propietario del local en el que se produjeron los hechos en 1.113 euros.
El imputado fue absuelto en diciembre de 2004 por la sección decimoséptima de la Audiencia de Madrid de dos delitos de asesinato y uno de homicidio que se le imputaban por la muerte en mayo de 2002 de dos comerciantes, Ángel S.P. y su hijo Ángel S.N., que fueron tiroteados junto al Puente de Praga, en el distrito de Usera.
LE ASESTÓ 25 PUÑALADAS
La resolución jurídica, a la que ha tenido acceso Europa Press, declara probado que sobre las 7.00 horas del 10 de agosto John Danilo P.C., acompañado de Carlos Arturo V.B., fue al bar 'JM', en el distrito de San Blas, y, tras realizar una consumición, mató de 25 puñaladas al camarero del mismo, Eugenio Mauricio P.R., con el fin de apoderarse de 1.113 euros producto de la recaudación.
El dinero se encontraba escondido en diversas partes del local, conocidos todos ellos por el imputado, quien había trabajado como camarero en el establecimiento hasta que fue despedido pocos días antes de producirse el suceso.
En el juicio oral, el procesado negó haber cometido los delitos, acusando en todo momento a Carlos Arturo V.B. --fallecido en un tiroteo que se produjo en 2002 en la calle de Francisco de Madariaga en el que también perdió la vida un policía--, aunque el tribunal estima que la versión que ofreció el imputado de los hechos "no era verosímil".
La sentencia, que ha sido recurrida en casación ante el Tribunal Supremo, señala que John Danilo P.C. se encontraba en el lugar del delito y "permaneció en él mientras se realizaba el apoderamiento de dinero y el apuñalamiento del empleado, como evidencia el hecho de que sus ropas se encontrasen impregnadas con la sangre de la víctima.
Asimismo, subraya que la contribución del encausado en el robo "resultaba decisiva, pues era él quien conocía donde se escondía el dinero por haber trabajado anteriormente en el establecimiento".
