Condenado a 4 años cada miembro de una pareja que recibió en su vivienda de Valladolid un paquete con cocaína

Actualizado: martes, 15 julio 2008 20:09

VALLADOLID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Valladolid condenó a cuatro años de cárcel y al pago de 8.800 euros a cada uno de los miembros de una pareja que recibieron un paquete postal con 113 gramos de cocaína procedente de San Miguelito (Colombia) en su domicilio de la capital vallisoletana.

La sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press en fuentes jurídicas y contra la que ya se ha anunciado recurso de casación ante el Tribunal Supremo, condena a la pareja formada por el ciudadano colombiano Francisco A.A.M. y su esposa María Isabel S.J.M. a cuatro años cada uno y al pago de 8.800 euros como autores de un delito contra la salud pública.

Así, el fallo considera probado que ambos son coautores del delito que se les imputaba y que, de mutuo acuerdo, encargaron la cocaína que llegó desde colombia en noviembre de 2006 y que fue recibida en el domicilio conyugal, ubicado en la calle Nueva del Carmen de la capital vallisoletana.

El fiscal pidió para ellos una pena de cinco años para cada uno y el pago de 10.000 euros de multa, mientras que la defensa solicitó su absolución.

Durante el juicio, Francisco A.A.M. achacó a una venganza por un lío de faldas el paquete postal con 113 gramos de cocaína y, al igual que su pareja, negó ser el destinatario de la droga y mucho menos dedicarse al narcotráfico.

"Entre los colombianos circulan rumores de que como me enrollé con la chica de un tío que se dedica a eso, éste me mandó el paquete con la 'coca' para joderme", explicó durante el juicio Francisco A.A.M, quien, en declaraciones recogidas por Europa Press, aseguró ganarse la vida como portero de discoteca y proclamó tanto su inocencia como la de su esposa.

El procesado declaró, al igual que su pareja, no conocer a la persona que figuraba como remitente del paquete enviado desde San Miguelito (Colombia), un tal Víctor Sánchez, y eso a pesar de que en el envío figuraban como destinataria su esposa y también acusada, María Isabel S.J.M, así como el teléfono móvil de ésta y la dirección de la vivienda.

Aunque en dicho inmueble se incautaron al matrimonio, una agenda con anotaciones y teléfonos, una báscula de precisión y bolsas de plástico de cierre hermético y una bolsita con restos de heroína, Francisco A.A.M. atribuyó la propiedad de la libreta a un hermano suyo de siete años, "que se dedicaba a jugar con ella", y mantuvo que la balanza la utilizaba la esposa para realizar tartas caseras y otro tipo de postres.

HACHÍS PARA DORMIR.

Por su parte, su mujer dijo desconocer la procedencia de las bolsas halladas en el domicilio, una de las cuales tenía restos de heroína, y dejó caer que las mismas pudieran haber sido dejadas por los anteriores inquilinos, ya que ella y su marido llevaban viviendo allí desde hacía tan sólo dos años y medio. Negó también ser adicta a las drogas y declaró que, al igual que su pareja, consumían ocasionalmente hachís para dormir mejor.

Los agentes de la Guardia Civil que participaron en la detención de la pareja relataron que tras detectarse en el Aeropuerto de Barajas un paquete postal con cocaína se montó un dispositivo especial para proceder a su entrega, de forma controlada, en el piso ocupado por los acusados.

Fue uno de los guardias el que se hizo pasar por funcionario de Correos y el que hizo la entrega del paquete a María Isabel S.J.M, que fue inmediatamente detenida, junto al marido, en cuanto firmó aceptando el envío.

Los efectos hallados en la vivienda durante el registro efectuado, junto con el propio paquete postal, fueron considerados por el Ministerio Fiscal como más que suficientes para acreditar la culpabilidad de sus moradores. Además, se analizaron los SMS recibidos en el teléfono móvil de la acusada y se comprobó la existencia de algunos mensajes dirigidos tanto a 'Mirian' como a 'Fran' que contenían una "jerga típica que evidenciaba que ambos se dedicaban al trapicheo de drogas", aseveraron varios de los agentes.