Varios compromisarios piden que el 0,7 de las cuotas de los militantes se destinen a ayudar a organizaciones no gubernamentales
MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un compromisario del PP ha presentado una enmienda a la Ponencia de Estatutos en la que pide acabar con los cuneros en la elaboración de las listas electorales, de forma que los candidatos a ser diputado o senador tengan que acreditar que tienen residencia "habitual" en la provincia durante al menos el último año y medio antes de las elecciones.
En concreto, propone que para "ostentar la condición de candidato a los cargos de diputado al Congreso o al Senado por cada una de las provincias, será condición indispensable acreditar la residencia habitual real en la provincia durante al menos los últimos 18 meses previos a las elecciones o justificar de modo fehaciente que su trabajo político habitual se realiza en, u orientado a, la provincia por la que sea designado candidato".
En las pasadas elecciones generales ya hubo algunos casos de parlamentarios cuneros. En este caso se encuentra por ejemplo el portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, Gustavo de Arístegui, que ahora es diputado por Zamora, en la pasada legislatura lo fue por Ciudad Real y en la VII engrosó las listas del PP por Guipúzcoa. CONDENA POR MALOS TRATOS, PERDIDA CONDICION DE AFILIADO.
También se han presentado un par enmiendas a esta ponencia pidiendo que los Estatutos recojan la pérdida automática de la condición de afiliado "por conductas relacionadas con la violencia de género en todas sus manifestaciones, y con independencia de su tipificación como delito o falta, siempre que sobre tales conductas haya recaído una sentencia penal condenatoria".
La Ponencia de Estatutos que han redactado Alberto Núñez Feijoo, Rosa Estarás y Alfonso Fernández Mañueco ya eleva el nivel de autoexigencia y propone suspender automáticamente de militancia a todo aquel afiliado que sea condenado.
Asimismo hay varias enmiendas sobre la compatibilidad entre ser alcalde y diputado nacional. Mientras que algunos abogan por permitir esa compatibilidad --como se ha hecho en las pasadas elecciones--, otros quieren que los estatutos impidan claramente mantener ambos cargos.
POTENCIAR USO DE LAS LENGUAS COOFICIALES.
El impulso de las lenguas cooficiales también figura en varias enmiendas. Así se reclama entre otras cosas que las comunidades autónomas con dos lenguas puedan elegir el idioma en la web "con un simple click" o que los textos de las ponencias se puedan facilitar en gallego, catalán o euskera si algún compromisario de estas autonomías lo desea.
Además se han presentado varias enmiendas en las que se pide que el 0,7 por 100 de las cuotas de los militantes se destinen a ayudar a las actividades de las organizaciones no gubernamentales a la cooperación al desarrollo, siendo el Comité Ejecutivo el encargado de adoptar los oportunos acuerdos para canalizar el destino de esas ayudas. Sus promotores justifican esta enmienda en el compromiso del PP en la lucha contra la pobreza.
DESPRESTIGIAR AL PP, INFRACCIÓN GRAVE O EXPULSION.
También hay enmiendas que piden mano dura contra aquellos que desprestigien al partido. Así, un delegado solicita que se catalogue como infracción grave el hecho de "propagar noticias u opiniones por cualquier medio, que desprestigien al partido, sean descalificatorias del mismo o de cualquiera de sus órganos de gobierno, representación o de los grupos institucionales".
Otro compromisario va más allá e incluso plantea que se pueda perder la condición de afiliado "por hacer declaraciones públicas en los medios de comunicación que menoscaben, desprestigien, afecten al honor, respeto del PP o de algunos de sus miembros".
