Convención PP.- Aznar avisa a Zapatero que si cede ante ETA acabará con "la libertad, con la democracia y con España

Actualizado: viernes, 3 marzo 2006 20:29

Pide al PP que no se deje "confundir" por el PSOE porque él no negoció con ETA ni puso al Estado "en tregua" frente al terrorismo

MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente del Gobierno y presidente de honor del PP, José María Aznar, quiso aprovechar su discurso ante la Convención Popular para lanzar un mensaje a José Luis Rodríguez Zapatero: Si cede ahora ante ETA y entrega lo que lleva pidiendo años con "las armas en la mano", logrará el fin de la violencia, pero conllevará el fin de "la libertad, la democracia y la propia España".

En tono enérgico, Aznar reprochó a Zapatero que esté "mendigando" una tregua a los terroristas hasta el punto de dejarse "humillar" y "humillar a todos los españoles", en vez de buscar su derrota. "Nosotros sabemos que los terroristas deben ser vencidos. Vencidos. Entre otras cosas, porque sabemos que pueden ser vencidos ?afirmó--. Mienten y nos insultan cuando dicen que no queremos el fin del terrorismo. ¿Cómo no vamos a desear más que nadie la derrota del terrorismo, con tantas víctimas de nuestro partido como hemos tenido que enterrar?".

Tras recordar que sigue existiendo un gran número de 'populares' que han sido asesinados, secuestrados, heridos y amenazados por los terroristas, subrayó que no es culpa del PP que se haya roto el pacto antiterrorista. "No ha sido el PP, ni ahora ni nunca, quien ha promovido resoluciones que dejan en manos de la banda fijar tiempos de la política antiterrorista", apostilló.

"No ha sido el PP, ni ahora ni nunca, quien ha abierto el camino a la negociación política mediante documentos en los que se habla de las ya conocidas mesas de partido --continuó--. No ha sido el PP quien ha menospreciado a las víctimas a las asociaciones que mayoritariamente las representan, ni quien les ha dado a entender que tendrán que aguantarse. Ni tampoco hemos sido nosotros quienes hemos hablado de que las víctimas sean un bando en pie de igualdad con el de los asesinos".

AZNAR EXPLICA SUS CONTACTOS CON ETA

Dicho esto, Aznar avanzó a sus compañeros de partido su intención de explicar cómo fueron sus contactos con ETA en el Gobierno, a fin de comprobar si "de una vez se avergüenzan de lo que están haciendo y diciendo" aquellos que pretenden usar al PP como ''coartada'' para sus negociaciones. "Que no os confundan", pidió.

Así, comenzó recalcando que su partido no es el que quería ver a la rama política de los terroristas en "los escaños y las instituciones", sino el que "propuso y sacó adelante, a pulso" la ilegalización de Batasuna dentro y fuera de España. "No somos el partido que quería ver pronto a los terroristas andando por la calle, sino el partido que llevó, por fin, el cumplimiento íntegro de las penas al Código Penal, y que quiso que los asesinos se pasaran 40 años en la cárcel", apostilló.

Después, agregó que tampoco son los 'populares' los que se han "olvidado" de condenar los atentados, o los que "minimizan" la presión callejera de los "radicales". Por el contrario, dijo, su Ejecutivo "plantó cara" a los terroristas, también cuando se dedicaban a "amenazar, quemar un cajero automático o interrumpir un pleno municipal".

"Y por todo eso, hemos tenido que pagar mucho y seguimos pagándolo. Que se lo pregunten a nuestros compañeros amenazados. Algunos, precisamente por decir que haríamos este tipo de política, tuvimos que sufrir el atentado en propia carne. Pero nunca nos echamos atrás. Nunca bajamos la cabeza. Nunca doblamos la rodilla", enfatizó, consiguiendo los aplausos del auditorio en pleno, que se puso en pie.

Dicho todo esto, Aznar apuntó que en 1996, cuando ganó sus primeras elecciones, cortó todo tipo de canales de comunicación con el entorno de los terroristas, evitando "tomas de temperaturas, mediadores o recados". "El único mensaje era este: Vamos a por vosotros, vamos a combatiros hasta derrotaros", señaló.

"Tantas veces nos negamos a todo lo que tuviera visos de pacto previo para una tregua, tanto les combatimos y, sobre todo, tanto se movilizó la sociedad después del crimen de Miguel Angel Blanco, que en septiembre de 1998, los terroristas pactaron una tregua, pero no con el Gobierno, sino con los nacionalistas. Y eso fue el pacto de Estella, un pacto entre nacionalistas y terroristas en el que estos últimos aportaban una llamada 'tregua indefinida e incondicional", aseveró.

SUIZA: SE PREGUNTÓ A ETA SI "SE RENDÍA"

Insistió en que él no fue el destinatario de aquella tregua de ETA y añadió que tampoco aceptó "negociar" con los terroristas, "tapar sus manejos, aceptar sus condiciones o bajar la guardia". Para reforzar ese argumento, sacó a colación que entre septiembre de 1998 y diciembre del 99, se desarticularon varios comandos en Guipúzcoa y Vizcaya, mientras que en Francia fue detenido el jefe de los comandos operativos, José Javier Arizkuren Ruiz, alias 'Kantauri' y apresados los responsables de un robo de explosivos. "Un poco más tarde se detuvo a una de las principales dirigentes de la banda (Belén Gómez Peñalba, 'Carmen'), y todavía me acuerdo de los que me decían que no debíamos detener a personas tan importantes como esas", aseguró.

Se preguntó entonces en voz alta si eso es "negociar" y también en voz alta se respondió: "No. El Estado nunca estuvo en tregua". "Desde el primer día dije buen claro que no iba a tocar el marco constitucional y estatutario. Y en el lugar más solemne, en el Congreso de los Diputados, dije que 'el orden constitucional que los españoles nos dimos no se puede romper ni se romperá, ni matando ni por dejar de matar'. Fin de la cita", resumió.

Echó en falta declaraciones similares por parte del actual Gobierno socialista porque, según dijo, él si actuó con "transparencia", con "lealtad y verdad a España" al anunciar que "se tomaría contacto con la banda" para que ésta probara la ''autenticidad'' de su anuncio de cese de atentandos. "Y en el único encuentro con la dirección de la banda terrorista, único en dos legislaturas del PP, celebrado tras nueve meses de tregua, sólo se fue a una cosa: a comprobar si estaban o no dispuestos a rendirse", puntualizó.

"Lo que vino a continuación no fueron mesas de negociación, ni peticiones de nada, sino combate a los terroristas, a los que les apoyan y a los que viven de ellos, sin salirnos ni un milímetro del Estado de derecho, concluyó. Y cuatro años más tarde, la banda estaba en el momento más débil de su historia y España estaba, con las víctimas, venciendo sobre los enemigos de la libertad".