Convención PP.- García Escudero pide a los 'populares' no olvidar que son aspirantes y Zaplana rechaza "bajar el listón"

Actualizado: sábado, 4 marzo 2006 16:07

Acusan a Zapatero de usar a los nacionalistas "como coartada" y destacan el "aplomo" con el que el partido superó la derrota electoral

MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los portavoces del Grupo Popular en el Congreso y en el Senado, Eduardo Zaplana, y Pío García Escudero, respectivamente, dedicaron hoy duras críticas al Gobierno de Zapatero durante sus discursos en la Convención Nacional del partido, pero lanzaron también mensajes internos para animar a su militancia a seguir trabajando para ganar las elecciones. Mientras Zaplana apostó por continuar con la misma labor de oposición y rechazó "bajar el listón", García Escudero se afanó en recordar que los 'populares' son los "aspirantes" y que "la inercia no es suficiente" para recuperar el poder.

García Escudero instó a sus compañeros a no cometer el "error" de imitar la "fijación en el pasado" que, a su juicio, tiene Zapatero. Por ello les emplazó a no "olvidar" el "bagaje histórico del PP", pero les advirtió de que "en política no hay nada más estéril que la nostalgia o los paraísos perdidos" y que deben tener muy presente que los 'populares' son "aspirantes" al Gobierno. "Y como tales no podemos permitirnos el lujo de esperar sentados la vuelta de nada", sentenció, a la vez que apostó por enriquecer "día a día una alternativa consistente para el Gobierno de España".

En este sentido, recalcó que el PP tiene la obligación de actuar con "firmeza y con sobradas dosis de inteligencia" y de hacer críticas "constructivas" al Gobierno, es decir, acompañadas de "alternativas" para configurar un programa con el que hacer frente al "actual viaje a la nada" del PSOE. En este punto recordó que las circunstancias de 1996, cuando el PP ganó por primera vez las elecciones, eran difíciles y que las actuales lo son también "pero de otra forma y sobre todo con mayor gravedad".

"Por eso precisamente, nuestro nivel de autoexigencia debe ser mayor que nunca. La inercia no es suficiente. Hace falta una gran dosis de energía y nosotros la tenemos", señaló, para aseverar a continuación que el PP tiene que "coger el toro por los cuernos" y no "regatear" el futuro "con un balón de fútbol".

APROVECHEMOS LA OCASION.

Acusó a Zapatero de pretender "refundar la nada" y hacer una "activa oposición" al PP. "Tenemos un Gobierno que flota en el vacío. Jamás un partido de oposición tuvo más campo de iniciativa a su disposición. Pues bien, sepamos aprovecharla", reclamó, para defender a continuación que el PP tiene un proyecto político "sólido", con el "liderazgo firme" de Rajoy, con una alta cualificación en sus cargos y una militancia "ejemplar".

A su juicio, gracias a todo eso, el PP pudo superar con "aplomo y entidad" la derrota del 14 de marzo y ahora no está "solo", sino con muchos ciudadanos a cuyas voces el presidente del Gobierno permanece "descaradamente inmune" porque está "entregado a los circunloquios". "Si de algo está sobrado el actual gobierno socialista es de ansiedad, de afán de crispación. Frente a tanto exabrupto y tanta enormidad, no hay mejor antídoto que el uso de la razón. Hoy en España abundan los gritos, pero se echan en falta argumentos", dijo.

García Escudero se mostró convencido de que, con "ilusión y esfuerzo" la victoria en las urnas está al alcance del PP. "Tenemos los mimbres para ello. Ahora debemos empezar a trenzarlos, con serenidad, pero sin pérdida de tiempo", afirmó, después de haber responsabilizado a Zapatero del "presente borrascoso" de España y de haberle reprochado su insistencia en "deformar" la Historia con su talante "revisionista retro". "España cuenta con el presidente del Gobierno que deambula a ciegas por el borde un acantilado y lo malo es que puede arrastrarnos a todos en su caída".

NO VARIAR LA ESTRATEGIA.

Por su parte, Zaplana apostó por ofrecer un "mensaje de confianza en el futuro" y "creíble", acorde con el "partido fuerte en sus convicciones, coherente con su trayectoria, unido y comprometido con el futuro de España y los españoles", que es el PP y destacó que va por buen camino a juzgar de lo que dicen las encuestas, por lo que abogó por no hacer cambios en la estrategia de oposición.

"¿Os imagináis qué pasaría en España si, como piden algunos bajáramos, el listón?. Pasaría que los españoles que son discriminados y perseguidos por utilizar el castellano no tendrían la referencia alguien que lucha y luchará por sus derechos y sus libertades, pasaría que los españoles tendrían que renunciar a la derrota de ETA y que nadie diría en voz alta que los españoles son iguales en derechos y deberes", proclamó Zaplana, tras celebrar que el PP no se haya "plegado" por "miedo" a "quedarse solo". "El Gobierno actuaría con total impunidad si no denunciásemos lo que hace como en una república bananera", apuntó.

El dirigente 'popular' acusó a Zapatero de haber intentado "arrinconar" y "aislar políticamente" al PP y avisó de que a medida que se acerquen las elecciones y las posibilidades electorales del PSOE disminuyan, los socialistas "serán capaces de cualquier cosa". Pero emplazó a los 'populares' a obviar esos ataques y a ir a lo suyo denunciando lo "mucho que hace mal" el Ejecutivo y ofreciendo a los españoles una "alternativa fiable y dispuesta a hacerse cargo del Gobierno de España".

Se mostró convencido de que con Mariano Rajoy, el PP ganará en 2008, subrayó que el presidente del partido es "la mejor garantía" para responder "con firmeza" a lo que los españoles esperan de su organización y de hecho recalcó que con él a la cabeza el PP ya está transmitiendo seguridad a los españoles. "Para mirar al pasado ya están los socialistas y sus socios", que quieren "reescribir la historia porque no tienen proyecto de futuro".

Destacó que el proyecto nacional "no está agotado" y enfatizó que el "progreso real de una comunidad autónoma depende de las buenas políticas y no del victimismo de los nacionalistas", a quienes, en su opinión, Zapatero utiliza "como coartada" para "cometer los cambios radicales que quiere poner en marcha sin contar con los españoles ni con su mandato", en un estrategia "suicida" y que únicamente el PP puede frenar.

LA ETAPA AZNAR NO ES EL PASADO, SINO EL EXITO.

"Si no hay Estado, la autonomía no existe, las autonomías necesitan un estado viable que las sustente y las cohesione. Sólo un Estado fuerte y no 17 comunidades, cada una por su lado, puede acometer reformas con éxito. El proceso autonómico no puede estar indefinidamente abierto y quienes no representan mas que una parte minoritaria de su comunidad sin sentirse solidario con el conjunto de España o negando su existencia no pueden ser los que condicionen permanentemente la política del Gobierno de España", remachó.

Calificó también de "suicida" el empeño de los socialistas en debatir sobre la Guerra Civil y de "reescribir la historia" de los gobiernos del PP y avisó a los afiliados de que el legado de la etapa de Aznar es su "principal activo para volver a ganar las elecciones". "Esa no es la política del pasado, esa es la política del éxito", arguyó.

Además, aprovechó su intervención para dejar claro que el PP seguirá haciendo todo lo que esté en su mano para que se conozca "la verdad" sobre los atentados del 11-M, habida cuenta de que, en su opinión, a Zapatero esa verdad dejó de interesarle el 14 de marzo. "Hemos tenido que superar las dificultades del cambio dramático que se produjo el 14 de marzo y a estas alturas la democracia española sigue sin saber quiénes fueron los autores materiales ni quiénes estaban detrás de aquella masacre", denunció.