Convención PP.- Piqué denuncia que Gobierno y CiU están pactando el futuro de los aeropuertos en sesiones nocturnas

Actualizado: sábado, 4 marzo 2006 21:07

Propone priorizar las reformas estructurales para superar el modelo de crecimiento agotado, frente a los debates territoriales

MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP de Cataluña, Josep Piqué, acusó hoy al Gobierno y a CiU de querer decidir el futuro de los aeropuertos españoles en sesiones nocturnas y apostó por "priorizar los auténticos debates", en vez de las prioridades que ha establecido el Gobierno que "no es lo que nos conviene". Piqué instó a realizar un paquete de reformas estructurales en diversas materias como impuestos, liberalizaciones y mercado laboral, porque considera que el modelo de crecimiento de los últimos años está agotado.

Piqué explicó esta tarde la sesión de trabajo que ha dirigido hoy, dentro de la Convención Nacional del PP, sobre el futuro modelo de crecimiento. Durante su explicación precisó que el modelo actual está agotado y en lugar de producirse un debate en el Gobierno sobre esta cuestión, afirmó que hay un debate "enfermizo" sobre problemas políticos que no interesan a la sociedad.

Apostó por crear una verdadera cultura de la competitividad en todos los ámbitos, y se mostró crítico con los que defienden la antiglobalización, por entender que "no se puede impedir que salga el sol". En este contexto, explicó que el centro de gravedad económico, demográfico y de flujos financieros se ha desplazado al Pacífico y al Indico. Por ello, consideró que tener en cuenta esto es más "sustancial" de cara al futuro que "discutir de pequeñas redistribuciones del poder político".

En este contexto, defendió llevar a cabo un paquete de reformas estructurales y entre ellas, citó los puertos y aeropuertos. Sobre este último punto lanzó una crítica a los negociadores del Gobierno y CiU del Estatuto catalán, ya que considera que "dos señores" en "sesiones nocturnas" están pactando el futuro de los aeropuertos españoles, ya que lo que ocurra con el Prat, que gestiona 40 millones de pasajeros, influirá en otros como el de Madrid, que gestiona 60 millones de pasajeros.

DICE QUE ESTA HARTO DE LOS TOPICOS.

Afirmó que lo importante no es quien manda en los aeropuertos, sino cómo hacer de estos un instrumento de progreso de este país y dijo que le agradaría que dejaran de descalificarlos y de practicar el brutal sectarismo que practican. En este sentido, dijo estar harto de los tópicos. "Se que es muy fashion decir que los del PP son anticatalanes", exclamó, pero precisó que le agradaría que los que les insultan hablaran de las cosas del futuro que se están hablando en esta Convención.

En cuanto a las reformas estructurales, citó, entre otras, la estabilidad de las cuentas públicas y la necesidad de que se vaya incrementando el peso del sector privado sobre el público; la política tributaria, proponiendo rebajas en los impuestos del IRPF --del 45 al 40 por ciento el tipo máximo y dejar en el 12 por ciento el mínimo--, y de Sociedades --del 35 al 25 por ciento y al 20 por ciento para pymes--, con incremento de deducciones para I+D, internacionalización y formación.

REVISAR COSTES DEL DESPIDO

También propone reformar el mercado de trabajo, después de que en dos años de Gobierno socialista no haya habido acuerdos en esta materia, mediante revisión de los costes del despido, los mecanismos de prejubilación o la movilidad geográfica. A estas reformas añade la innovación en las empresas, la liberalización de los mercados de la energía, revisando el papel de los organismos reguladores de los que dijo que han hecho un "triste papel" en los últimos tiempos.

Propuso la integración de la red transeuropea de transportes, denunciando el abandono "obsceno" del corredor mediterráneo que maneja la mitad de la riqueza de este país.

Pero matizó que todo esto no es suficiente si no se mejora el capital humano, por lo que apostó por mejorar la educación y la formación profesional, de las que dijo que son un "desastre". Pero para eso, dijo, hace falta rigor y coherencia y lo último que se necesita es "perder el crédito internacional".