Cospedal no se arrepiente de las acusaciones de espionaje y dice que encausar a la oposición es propio de "dictaduras"

Actualizado: jueves, 17 septiembre 2009 12:46

MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, aseguró hoy que no se arrepiente "en absoluto" de haber acusado al Gobierno de realizar escuchas ilegales a miembros de su partido porque tiene la "obligación moral y política" de denunciar la "vulneración" de derechos fundamentales, como la presunción de inocencia o la intimidad. Además, acusó al Ejecutivo de haber "utilizado" todo tipo de instituciones para dañar la imagen del PP y advirtió de que "abrir una causa política contra el partido de la oposición e propio de las dictaduras".

"No nos arrepentimos en absoluto", respondió Cospedal al ser preguntada si rectificaría las acusaciones sobre supuestos espionajes a dirigentes 'populares', durante una entrevista en la Cadena Cope recogida por Europa Press. A este respecto, alegó que el PP representa a "muchos millones" de españoles y alberga a 700.000 militantes por lo que "cuando se está produciendo la vulneración de derechos fundamentales reconocidos en la Constitución" y se atenta contra el derecho a la intimidad, la presunción de inocencia o el secreto de las comunicaciones, tiene la "obligación de denunciarlo".

"Está en nuestra obligación moral y política denunciar ese tipo de comportamientos. No es que le ocurra a personas destacadas del PP es que no le puede ocurrir a nadie de este país", señaló.

En relación con el caso 'Gürtel', la 'número dos' del PP respondió que su partido espera a la tramitación del procedimiento judicial y que éste culmine "lo antes posible" porque la Justicia "para ser justa tiene que ser rápida". "A partir de ahí estaremos centrados en la defensa judicial que corresponda y las actuaciones judiciales", agregó.

"Este acoso que ha sufrido el PP por parte del Gobierno utilizando todo tipo de instituciones para tratar de dañar la imagen del partido no hay sido fructífero para el PSOE", opinó De Cospedal, quien subrayó que su partido exigirá "antes que nadie" las responsabilidades que puedan existir en el caso porque en un Estado de Derecho cuando uno se comporta contrariamente a la Ley "tiene que ser perseguido" y se debe actuar en su contra.

No obstante, Cospedal subrayó que "no se puede abrir una causa política contra el partido de la oposición porque es propio de las dictaduras". "Es una cuestión de estilo", concluyó.