El popular propone debates monográficos sobre inmigración, seguridad y exteriores tras enzarzarse con Zapatero sobre estos asuntos
El presidente resume la política exterior del PP en Azores y AbuGraib y le reprocha querer gobernar con CiU, que desarrollará el Estatut
Rajoy acusa a Zapatero del efecto llamada en inmigración, de promover el Estatut por cuestión de poder y de perder influencia en el mundo
MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, comenzó y acabó su enfrentamiento dialéctico con el presidente del PP, Mariano Rajoy, una vez que ambos habían pronunciado sus discursos iniciales en el debate del estado de la Nación, acusando a los populares de "oposición fallida" por entender que han fallado las profecías "catastróficas" que le ha vaticinado Rajoy desde que es presidente del Gobierno. Por su parte, el líder popular acusó al presidente de debatir sólo sobre el pasado y no sobre el presente.
Ambos acabaron enzarzados en cuatro asuntos, la política de inmigración, la seguridad ciudadana, la política territorial y la política exterior, con acusaciones como el resumen que realizó Zapatero de la política exterior del PP, que centró en Azores y AbuGraib --la prisión de las torturas en Irak-- o las que le realizó el presidente del PP, quien le acusó de provocar un efecto llamada en inmigración, de promover un estatuto catalán por cuestión de poder y de lograr que España pierda influencia en el mundo.
El debate entre ambos estuvo jalonado de multitud de aplausos y abucheos y destacó la queja de los populares por el tiempo de que dispone el líder de la oposición para debatir con el presidente, lo que llegó a provocar que, tras discutir con el presidente de la Cámara, Mariano Rajoy se bajara de la tribuna.
En otra de sus intervenciones y ante la escasez de tiempo, propuso realizar tres debates monográficos con Zapatero sobre inmigración, seguridad ciudadana y política exterior. Propuesta que el presidente no aceptó argumentando que pedir más debates en un debate refleja la convicción de la oposición sobre el resultado del mismo.
Tras concluir Rajoy esta tarde su primera intervención, el presidente del Gobierno pasó de un discurso inicial explicativo de su política a rebatir con duros ataques las acusaciones que acababa de recibir del presidente del PP.
El jefe del Ejecutivo comenzó acusando a los populares de "oposición fallida" o de "profetas fallidos" por haber errado en las "profecías" de catástrofes, de paro, despilfarro y corrupción de que le había acusado Rajoy desde que es presidente del Gobierno. "Estos dos años han sido profetas del desastre y además, un desastre como profetas", enfatizó y acusó a Rajoy de no haber hecho "ni una sola propuesta, ni una sola alternativa" en su discurso.
Rebatió al dirigente popular sus acusaciones en materia de Seguridad y lo hizo recordando que cuando éste fue ministro del Interior, las convocatorias públicas de efectivos policiales eran la mitad de las que actualmente realiza el gobierno que superan los 9.600 agentes por año, para compensar, dijo, el "déficit" que hubo entre 2000 y 2004.
RECUERDA A RAJOY QUE CUANDO ERA MINISTRO AUMENTO LA CRIMINALIDAD
Le recriminó también sus acusaciones por el incremento, recordó, de la criminalidad durante su mandato en Interior, del 45,5 al 50,5 por cada 1000 habitantes. No obstante, Zapatero afirmó que lo que más le había sorprendido es que Rajoy afirmara que ahora hay nuevos tipos de criminalidad por los asaltos a chales y los secuestros de grupos organizados.
En este sentido y luego también en la réplica, reiteró que durante el Gobierno del PP se habían producido asaltos de este tipo y, en algunos casos, con resultado de muerte. Citó, a este respecto, el asesinato de un abogado en Pozuelo y también la información de un periódico de 22 de enero de 2003 que titulaba que "más de 2.000 delincuentes peligrosos se pasean por Madrid en más de 100 bandas organizadas".
INMIGRACION, EFECTO LLAMADA
La inmigración centró otro de los asuntos en los que Zapatero y Rajoy se enzarzaron dialécticamente. El presidente también utilizó los datos de los años del Gobierno del PP para rechazar la acusación del presidente de los populares de que la regularización de 700.000 inmigrantes ha provocado un efecto llamada. Recordó que el PP también realizó regularizaciones, leyó los titulares de los periódicos de febrero de 2000 y destacó las dificultades que tuvieron con ellas.
Defendió su política a este respecto preguntando a Rajoy qué se puede hacer con 700.000 inmigrantes y descartó que la mejor solución sea expulsarlos porque, argumentó, "no hay administración capaz de hacerlo". No obstante, explicó que se han realizado expulsiones y se realizarán más en los próximos días, destacando de esta manera la cooperación con Mauritania y Senegal y las gestiones con la UE para que colabore en el control de fronteras.
Recordó a Rajoy que en 2003 se produjo la mayor llegada hasta 2005 de inmigrantes en patera, 20.000 y culpó al PP del incremento de los irregulares que llegan por los aeropuertos por haber reducido allí los efectivos policiales.
La política exterior volvió a enfrentar a ambos líderes y Zapatero acusó en este punto al PP de realizar "expediciones históricas" como la de Azores "o lo que vino después, Abu Graib". En este punto, instó al PP a reconocer, como lo han hecho Bush y Blair, "ciertos errores sobre la intervención en Irak".
Rechazó las acusaciones de la pérdida de influencia de España en el exterior y recitó algunos titulares de prensa extranjera para avalar sus tesis, así como las visitas de mandatarios extranjeros y cumbres internacionales en España.
ACUSA A PIQUE DE MENDIGAR EL GOBIERNO CON CIU
En política territorial, argumentó que su idea de España es la constitucional, de las autonomías. Acusó a Rajoy de "no tener ni idea" de lo que es realmente España y afirmó que el Parlamento, tal y como es, "no cabe en su idea de España".
En este punto y para rebatir las acusaciones de Rajoy de que el Estatut fue un asunto de puro poder, acusó al presidente del PP catalán, Josep Piqué, de estar "mendigando" todos los días para gobernar con CiU, un partido con el que se ha pactado el Estatut y que va a desarrollarlo.
RAJOY ACUSA A ZAPATERO DE SECTARISMO Y DE NO TENER PROYECTO
El presidente del PP acusó a Zapatero de no haber ido al Parlamento a debatir de la nación en 2006, sino de realizar los debates de años pasados. Recordó, en este sentido, que el presidente ha dedicado más tiempo a hablar de él, que tenía 24 años cuando se debatió el estatuto catalán de 1979 y estaba haciendo la mili, que de la política del Gobierno.
Rajoy acusó a Zapatero de no tener proyecto definido, sino de gobernar a "salto de mata" e improvisando, le espetó que él no necesita lecciones de oposición, pero apuntó que el presidente está haciendo oposiciones para volver a la oposición y reiteró su acusación de "sectarismo" contra el PP. Algo, insistió, que se refleja en el Pacto del Tinell y en los eslogan del PSC. En política territorial insistió en que el Estatut fue un asunto de "puro poder" y en inmigración, reiteró que la "mayor regularización de la historia" aprobada por el PSOE ha provocado efecto llamada, al tiempo que acusó al Gobierno de ocultar la muerte de más de 1.000 subsaharianos en el mar denunciada por el CNI.
En cuanto a la seguridad ciudadana, rebatió las cifras de Zapatero, alegando que entre 1990 y 1996, los gobiernos de González hacían convocatorias de entre 1.000 y 1.400 efectivos al año, mientras que él las multiplicó por cuatro y volvió a instar a endurecer el Código Penal contra las mafias.
Instó también a Zapatero a explicar su política exterior y decir, entre otras cuestiones que suscitó, por qué no recompone las relaciones con EEUU cuando lo están haciendo todos los gobiernos.
