MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
La declaración prevista para este jueves del jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional que investigó la Gürtel, Manuel Morocho, a raíz de la querella interpuesta por los líderes de la red corrupta por presunta falsificación documental se ha aplazado sin fecha hasta que la juez resuelva si permite la personación en esta causa de otro de los condenados en la 'Época I' de la trama.
Según han informado fuentes jurídicas a Europa Press, la defensa de este condenado por la trama Gürtel ha pedido adherirse a la querella presentada por Pablo Crespo, el 'número dos' de Francisco Correa, y poder interrogar como investigados a Morocho y a otro policía que, presuntamente, firmar varias actas relativas a los distintos registros que tuvieron lugar en febrero de 2009, cuando estalló el caso 'Gürtel', al mismo tiempo.
Sin embargo, los abogados de los querellados han impugnado este intento de personación al considerar que no es un perjudicado y que por tanto no tiene legitimidad para realizar ningún tipo de acusación , según han apuntado las fuentes consultadas. Mientras se resuelve este asunto, la titular del Juzgado de Instrucción número 39 de Madrid, Belén Sánchez, ha suspendido las declaraciones de ambos investigados, más la de 21 policías citados como testigos.
La querella presentada por Crespo, y a la que se adhirió después la defensa de Correa, fue inicialmente archivada por la juez instructora, pero finalmente se vio obligada por la Audiencia Provincial de Madrid a reabrir la causa y llamar a declarar a Morocho y al otro agente.
El 'número dos' de la Gürtel afirma en su querella que el "agente 81.067" y otro compañero firmaron al mismo tiempo las actas derivadas del registro de la sede de las empresas de Correa, en la calle Serrano 40 de Madrid, y otras relacionadas con la que fuera la administradora de estas sociedades, Isabel Jordán.
Tanto la defensa de Correa como la de Crespo ha intentado anular estos registros alegando vulneración de derechos e irregularidades durante la instrucción de diversas piezas de la macrocausa, como en los propios juicios que hasta ahora se han celebrado.
