ALBACETE, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
El delegado sindical de CC.OO. y miembro de la Comisión de Seguridad, Vicente Acebal Miñano, declaró hoy en el juicio por el accidente ferroviario de Chinchilla (Albacete) de junio de 2003 que no se puede atribuir la culpa de la colisión ni al maquinista del Talgo ni al factor de circulación de la estación, sino más bien a un "conjunto de circunstancias irrepetibles".
Ésta es la principal conclusión del informe que Acebal Miñano -aceptado como perito a petición de la defensa- defendió en eL Juzgado de lo Penal número Uno de Albacete, que juzga a José Luis D.C., jefe de la estación de Chinchilla, por 19 homicidios en grado de imprudencia.
Su informe se presentó en la sesión de tarde de la vista oral, cuestionando así el documento oficial de Renfe que Andrés María Cortabitarte, jefe del Gabinete de Investigación de Accidentes de Renfe, presentó por la mañana y poniendo en duda muchas de sus conclusiones.
Según avanzó el delegado sindical, su investigación "cuestiona" tanto la hora de colisión del informe oficial como el resto de los datos horarios que éste refleja, en el sentido de que, según los cálculos realizados, "si se hubiera avisado al puesto de mando antes de los primeros 60 segundos (tal y como defiende la defensa que el acusado hizo), los trenes se hubieran podido detener". En función de esos mismos cálculos, los maquinistas pudieron recibir un aviso de emergencia aproximadamente 1 kilómetro antes del punto de colisión.
LLAMADA URGENTE.
Sobre la posibilidad de realizar una llamada de 'Alto Urgente', Vicente Acebal Miñano expresó distintas consideraciones acerca del estado de las comunicaciones. Aseguró que con un walkie-talkie (modalidad C) de una estación "no se puede hacer una llamada de emergencia" y que las llamadas generales desde el puesto de mando de Valencia (modalidad A) llegan a los maquinistas siempre y cuando tengan conectado este canal, incompatible con el walkie.
En este sentido, recordó que hay máquinas con equipos de nueva generación que admiten entradas de llamadas de las dos modalidades simultáneamente, pero declaró que "no consta en el informe" que el Talgo siniestrado tuviera esa dotación.
Por último, el miembro de la Comisión de Seguridad apuntó la posibilidad de que se produjera "algún tipo de demora" en la reacción del puesto de mando a la llamada del factor como consecuencia de que se trataba de una "llamada normal" que debía ser descolgada y no una llamada directa con los "teléfonos selectivos" de los que no dispone Chinchilla.
